La Ribeira Sacra se prepara para el primer fin de semana con posibilidad de visitantes foráneos después de estrenar este sábado los viajes en catamarán, que conquistaron el primer día a medio centenar de usuarios. También se retoman las actividades de "escape room" al aire libre: el servicio "Búskalo" recibió ayer a las primeras familias en esta especie de juego para conocer la Ribeira Sacra.
Una de las apuestas de la zona de las últimas temporadas son los vuelos en globo: ya se permite hacer reservas y se inician en el mes de julio, con un coste aproximado de 170 euros por persona. Las "Rutas del Románico" también anuncian su regreso para el 1 de julio, con medidas de seguridad y aforo más reducido de participantes.
El monasterio de Santa Cristina y el de Montederramo o la Casa Museo del Chocolate de Parada de Sil también esperan visitantes postcoronavirus. Asociaciones de vecinos o colectivos como el de Móvete por Nogueira también ponen a punto sus rutas.
Este último prepara una ruta del contrabando y ha acondicionado la llamada "Albariza do Vello", en el mirador de Pedome. Los alcaldes de la Ribeira Sacra ourensana también hacen un llamamiento al turismo para revitalizar la candidatura a Patrimonio Mundial.