Estados Unidos entra en guerra con Irán tras bombardear tres instalaciones nucleares
ATAQUE A IRÁN
Los estadounidenses se enteran por redes sociales de que están en guerra con Irán
Estados Unidos ha entrado oficialmente en guerra con Irán tras lanzar una ofensiva aérea directa contra tres instalaciones nucleares en Fordo, Natanz e Isfahán.
El anuncio del ataque lo hizo el propio presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, sus redes sociales: "Hemos completado con gran éxito nuestro ataque contra tres instalaciones nucleares en Irán".
En una posterior declaración televisada, Trump afirmó que el objetivo era “destruir la capacidad de enriquecimiento de uranio de Irán y frenar la amenaza nuclear” que, según dijo, “representa el Estado patrocinador del terror número uno del mundo”. Asimismo, confirmó que los ataques fueron coordinados con Israel. Benjamin Netanyahu, celebró el ataque como “una victoria de la paz a través de la fuerza”.
El Pentágono ha elevado la alerta máxima para las fuerzas desplegadas en la región, que incluyen a más de 40.000 soldados.
La respuesta de Irán: “Nos reservamos todas las opciones”
El régimen iraní calificó el ataque como “una violación flagrante del derecho internacional”. El ministro de Relaciones Exteriores, Abbas Araghchi, afirmá que Irán se reserva “todas las opciones para defender su soberanía, sus intereses y su pueblo”. No obstante, la respuesta militar ha sido inmediata, Irán ha respondido lanzado una serie de misiles contra Israel.
La ofensiva ocurre días después del lanzamiento de misiles israelíes sobre territorio iraní, lo que ya había desatado especulaciones sobre la posible implicación estadounidense. Analistas de seguridad temen que escalada de violencia involucre no solo a Irán y EE.UU., sino también a milicias respaldadas por Teherán en Líbano, Siria, Irak y Yemen. Reacciones internas e internacionales
Los demócratas estadounidenses han censurado a Trump por actuar sin autorización previa del Congreso. del Congreso. Mientras que los republicanos respaldan la ofensiva calificándola como una respuesta necesaria.
Por su parte, desde la OTAN António Guterres manifestó estar “profundamente alarmado” y advirtió sobre las consecuencias catastróficas que podría acarrear una guerra.
Estados Unidos no bombardeaba suelo iraní desde la muerte del general Qasem Soleimani en 2020. Lo que pueda ocurrir a partir de ahora es difícil de predecir.
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