Decía el concejal Pérez, en una de sus últimas intervenciones plenarias, que, como representante público, le resultaba escandaloso que el Concello de Ourense hubiese comprado a su empresa un piano de 120.000 euros, pero que, como empresario, era su obligación promover esa venta. Pérez Jácome, empresario-político, tiene la suerte y la virtud de desdoblarse a conveniencia. Ahora es empresario, ahora es concejal, ahora es empresario, ahora es concejal... Como empresario se beneficia de un contrato del Concello a dedo por importe de 62.000 euros; como concejal denuncia las adjudicaciones a otras empresas. Como concejal ataca a las empresas que prestan servicios a la Administración porque reciben dinero público; como empresario hace negocietes con el Concello y con la Diputación... Se desdobla: es un empresarios que hace política y un político que hace empresa. Un genio.
