Alberto Núñez Feijóo ha anunciado la aprobación del plan denominado 'Extratexia de Especialización Intelixente RIS3', por el que la mayoría de los Fondos Estructurales de la Unión Europea destinados a Galicia para el período 2014-2020, es decir unos 1.600 millones de euros de un total de 2.700 millones, se invertirán en innovación en nuestros sectores estratégicos: ganadería, turismo, textil, alimentación, fabricación de vehículos, cultura, investigaciones marinas y otras, involucrando a universidades, empresas, centros tecnológicos, clústeres y todo el que pueda o quiera aportar algo. Constantemente los ciudadanos, sin esperanza, se preguntan: '¿cómo salimos de esta crisis?'. Pues a mi modesto entender, la inversión en innovación es el camino adecuado, seguro y sostenible. Sólo si somos competitivos y eficientes ganaremos mercado tanto en el interior como en el exterior y con ello reduciremos el paro endémico y mantendremos un nivel de empleo estable y aceptable.
Que esto lleva su tiempo, claro que lo lleva y por eso cuanto antes lo hagamos mejor. Que hay que cambiar la mentalidad de la sociedad, pues sí, ahora es el mejor momento porque la crisis agudiza el ingenio y las nuevas generaciones ya saben que su camino es innovar y emprender. Esta decisión de la Xunta es un plan estratégico para Galicia con mayúsculas, que debería crear ilusión y esperanza en la población. Dice Feijóo que se trata de un plan que no es exclusivo de la Xunta y creo que tiene toda la razón, porque la Xunta puede decidir el destino de los recursos económicos (la innovación), pero el resultado depende de que la sociedad civil y empresarial innove. Ambas actuaciones, la de la Xunta y la de la Sociedad, tienen que converger, porque si no el esfuerzo sería inútil. Innovar es incrementar el valor del producto, pero también supone valorizar a Galicia como lugar de innovación. Esta sí es la verdadera marca que hay vender dentro y fuera, no solo el nombre.
La decisión de la Xunta supone un cambio de rumbo de la economía gallega al pasar de la inversión masiva de los Fondos Estructurales en cemento a su inversión en inteligencia. Ahora hace falta que este plan estratégico se inicie y que el impulso se mantenga desde el 2014 al 2020 y más allá, con una decisión política firme de llevarlo a cabo. Hace unos meses la Xunta creó la Agencia de Innovación gallega, ahora aprueba un plan estratégico en innovación y con ello damos un paso fundamental. Les confieso que hacía años que esperaba una decisión así. Este es el camino de Galicia.