Lunes, 22 - Las razones del periodismo de piel
Hace mucho que las historias con rostro han ganado a las de la política de hologramas que nos ha tocado vivir. Cuando la piel llega a los titulares el lector viene. El lunes presentamos un periódico con la dignidad de los números, los sesudos análisis de la postración de la provincia que espera dádivas porque no exige derechos. Sin embargo el lector se empapó hasta las cachas con la historia de José Saburido, que perdió su casita bajo el Puente Novísimo tras un incendio intencionado. Su recorrido vital pasó por el tamiz de Elisabet Fernández y la grey se echó a la lectura con apariencia voraz. Me consta que lo hizo por el buen tono de la narración, pero dudo si lo hizo además por el interés de una historia que tiene mucho de singular o por el marujeo lastimero de gozar leyendo desgracias ajenas.
Martes, 23 - Era la leche, todo estaba ya en los libros
Llegó Feijóo a ver a Jácome y entre los papales que el presidente gallego lee con avidez incluso cuando va de viaje, su gabinete le colocó un entrecomillado de Nelson Mandela: "Si quieres hacer la paz con tu enemigo tienes que trabajar con él. Entonces se convierte en tu compañero". Tuvo aquello cierto efecto balsámico, un remedio que no había conseguido la dosis de antiácidos que había ingerido para verse con el atrabiliario regidor ourensano. El encuentro tuvo el carácter protocolario que era de esperar y el relatorio de buenas intenciones propias del caso. Jácome confesó amor al primer mordisco con el presidente de la Xunta, el político "más interesante que he conocido hasta el momento". Baltar en ese momento tuvo un retortijón. Jácome aprovechó para reconocer que había "pedido consejo de gestión" a Feijóo. Jácome tiene serios problemas de ubicación y anda pidiendo asesoramiento, gesto que le honra. Con ello asume algo tan viejo como que aprendido nadie nace, lo que le hace humano después de aparentar infalible en la oposición. Se va dando cuenta poco a poco de que es alcalde, pero eso también es un riesgo. El cargo y la realidad ya le modula pretéritas intenciones, lo que pasa es que la mayoría de sus votantes sospecho que lo hicieron premiando su parte bizarra, no su supuesta capacidad gestora. ¿Qué opinará ahora el que le votó por su capacidad de insultar al árbitro, ahora que le toca arbitrar a él? Pero ya es alcalde, ya se probó una americana y al día siguiente un traje. Lo próximo será no abroncar en los plenos, ya verán. El periodismo ha caído también en esto, en fijarnos en la indumentaria porque los discursos no hay por donde cogerlos. Aquel encuentro institucional entre Feijóo y Jácome tuvo un valor muy relativo: inversiones ya conocidas y a ver qué hacemos con el parque acuático y el Centro de Inteligencia Artificial (CIA por sus siglas, qué curioso). Ahí no hubo noticia pero los periodistas dimos grandes titulares y frases para cultivar aún más las perlas. Ninguna, de momento, como la de Jácome en la entrevista del pasado domingo: "Cosas que descubro, y creo que son la leche, luego me doy cuenta que llevan años y años escritas". Le pasó como al personaje de Jacinto Benavente, El Principe que todo lo aprendió de los libros, que de tanto leer cuentos de hadas se creía que era príncipe azul. Será por eso que se creyó que era el inventor del odio y la incompatibilidad política hasta que pisó moqueta y también se le cayó ese sombrajo. Como el de la chaqueta, el traje, el coche oficial, los 68.000 euros de sueldo y hasta el palio si lo hubiera. "No hay nada como volver a un lugar que parece no haber cambiado para descubrir en qué cosas has cambiado tú mismo", dijo Mandela, por recordarlo de nuevo.
Miércoles, 24 - Es obvio, no se puede saber y opinar de todo
Es imposible dominar todos los temas, tener argumentos para sustentar todas las teorías, llegar a conclusiones determinantes a base de someras lecturas. Es injusto acerar críticas sin conocer todos los puntos de vista. Sospecho que con la Universidad nos está pasando algo parecido. Las decisiones que se han tomado (y se toman) en relación al campus de Ourense nos llevan a creer que algo no está yendo bien, que el mapa de titulaciones deja al descubierto importantes eriales. Pero, insisto, quizá todas esos sean pensamientos irreflexivos de críticos irredentos que martillan siempre en el mismo clavo. Quizá sea eso porque a la vicerrectora del campus ourensano todo le parece estupendo, que no hay nada de lo que lamentarse. También al 99% de la comunidad universitaria, que calla como si la cosa no fuese con ella. Y a lo mejor es que no va.
Jueves, 25 - Algo mejor que este bocata de mortadela
La mediocridad política que no pierde oportunidad de avergonzarnos deja estos tiempos el poso de la resaca. El paladar pastoso, la mirada estrábica, la cabeza llena de arena. Pero, aún así, y como compuso Serrat, "con la resaca a cuestas vuelve el pobre a su pobreza, el rico a su riqueza y el señor cura a sus misas". En el desierto de titulares desparramados por la semana adelante, pillamos al vuelo un sin embargo. Las empresas ourensanas exportan cada vez más y mejor. Caminan las ventas a ritmo de récord y su competitividad convence a otros mercados. En medio de esta mortadela política que nos toca a diario, por fin un buen jamón.
Viernes, 26 - Ligeros saltos de letras en las palabras
Se habían citado en el Congreso de los Diputados 350 diputados para un debate de investidura y todo se quedó solo en una debacle de investidura.
Sábado, 27 - La soledad también tiene un fuerte olor
Un septuagenario llevaba meses muerto en su casa y los vecinos llamaron a la Policía por el fuerte olor que desprendía su cuerpo en descomposición. El Concello, incluso sorprendido, echa manos al asunto. La sociedad de las comunicaciones es también la de la soledad infinita. Esta ya solo es evidente cuando huele.
