Opinión

Faltó vehemencia, sobró obstinación

Tanto nadar para ahogarnos en la orilla". Era la frase que pronunció Fran González, capitán del Deportivo, tras perder aquella famosa Liga en el último minuto al fallar su compañero Djukic un penalti.

Oportuno referente a lo sucedido en el Pazo el pasado viernes cuando Salva Arco, en el último segundo, falló un tiro libre que llevaría a la disputa de una prórroga y quizá a un resultado distinto. Pero no fue así. Pues si bien esa posibilidad podría ajustarse a lo sucedido en los últimos minutos de partido cuando el COB, con el esfuerzo como mayor argumento táctico, fue capaz de remontar hasta 20 puntos de desventaja, incluso a un inicio de partido pleno de intensidad y acierto por parte ourensana, lo evidente fue que su rival, el Quesos Cerrato Palencia, sin mostrarse superior, cuando menos fue más determinante en su sobriedad que el COB capaz de prolongar su pasión inicial.

En las rotaciones, segundo y tercer cuarto, surgieron las dudas. La vehemencia de Chase Fieler no tuvo la continuidad o convergencia, puntos y asistencias, que se le supone por parte de Guillermo Rejón, perfectamente "fijado" por quienes aún no hace mucho habían sido sus compañeros. En la obstinación táctica e incapacidad grupal ourensana para superar esa férrea defensa interior del Palencia estuvo la clave del partido. Fue la cuarta personal de Deividas Busma y sus sustitución por Chase Fieler lo que a modo de revulsivo y vuelta a aquellos valores de intensidad y presteza hasta ahora mostrados por el conjunto ourensano lo que propició la recuperación, pero sin tiempo posible. Lo justo el empate. Pero como no puede ser... para el más afortunado.

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