Opinión

Penedos de Anamáo

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photo_camera Los Penedos de Anamâo. En el mismo linde fronterizo se alzan señeros en el rocoso panorama serrano, vistos desde la ruta que se describe.

Una de montaña por el suroeste provincial tocando las sierras de Quégoas, la de Laboreiro y la de Anamâo, que se puede hacer en dos tramos: el primero de 25 kilómetros con salida y llegada a Entrimo, dificultad media alta, para quedar en media si se hace la de 16 kilómetros, con salida y llegada a Quégoas.
Esta ruta es muy conocida por los participantes de las "Camiñadas de Montaña" de Entrimo. Tiene la larga un desnivel cercano a los 700 metros y tocan las dos la  línea fronteriza precisamente en los Penedos de Anamâo.

La marcha discurre por el parque Baixa Limia-Serra do Xurés y Parque Nacional Peneda-Gerês, atraviesa, además de la capital entrimeña de Terrachán, las aldeas de Qúegoas, Venceás y Vilar, y lugares mágicos como os Penedos, el dolmen o casa da Moura, las cortes de a Carballeira, la carballeira de Vilar…amén de esa magia de atravesar la frontera por el roquedo donde tantos lances entre contrabandistas, guardihnas y carabineros. 
Se sale de la capital entrimeña precisamente detrás del hostal del mismo nombre. Camino amplio entre muros de fincas, se atraviesa un regato, y entre mimosas comienza una subida por lo que fue cortafuegos, se vira a los 300 metros a izquierda, por sendero, atraviesa la carretera se introduce entre el pinar y sale en las inmediaciones de o Pedreiriño, por a veces enlosado camino, atravesando de nuevo la carretera a Quégoas, pasando al lado de estanque para continuar por pista como 150 metros y tomar a derecha por definido camino, que se introduce entre el retamal que es cuando se hace llano por 300 metros para acometer una dura subida por la ladera, visible por los pisadas de cientos de montañeros que finaliza a más de 1.000 metros en una pista que se debe toar hacia la cima. A derecha dejamos la aldea de Vilar y la de Venceás que no vemos. La pista se inclina después de un llano y en el primer cruce debemos tomar a derecha, donde se endurece y pasadas unas curvas se hace llanura, en dirección noroeste debemos ingresar en la penillanura de la sierra de Quégoas por 3 kilómetros para virar a izquierda en lugar entre brezos de un abierto cortafuegos, dirigiéndonos a los penedos, bajar entre el espeso brezal, traspasar un regato y hacia el norte donde se avistan un penedío, hacia los de Anamáo en el horizonte norteño, nos dirigiremos monte a través sin otro camino señalado.

Caminando entre el peñascal, pasando el límite fronterizo, en lacima, espléndidas vistas.
El retorno en dirección sur tomando los penedos a izquierda, aprovechando un claro del brezal y dirigirnos al dólmen o casa da Moura, pasando antes regato, subiendo por un corral de vacas. Desde el dólmen, se siguen los postes del parque hasta bajar hacia las Cortes da Carballeira, con su ermita de la Ascensión y sus casetas que fueron refugio de pastores, casas restauradas para turismo de montaña y ahora cuadras. Un camino empedrado, corredoira, nos lleva hacia abajo hasta Quégoas y en dirección Venceás que se ve al fondo, continuar por amurado camino. Una vez en Venceás tomar la dirección Vilar, por camino casi paralelo a la carretera. Vilar famosa por su carballeira es paso obligado, cuando en la primera casa se vira a izquierda por acimentado camino, para bajar a la carballeira, que caminada lleva al área de Pacín o rio de la Montaña, pasaremos el puente nos meteremos por su parque y al pasar otro puente de madera, viraremos a izquierda para adentrarnos en las hermosas pozas y cascadas del rio por Os Cirolos, ganaremos la carretera que a menos de 100 metros nos mete a izquierda por terrea pista, que debemos seguir hasta el lugar de O Casal. En la capilla tomar a derecha, pasar el dintel del abandonado pazo da Represa, y por su pinar adentrarnos en corredoira entre muros, para ir a izquierda y salir a Entrimo.


Ruta menor: 16 kilómetros


Arranca del final de la carretera que antes de llegar a Quégoas, sube a izquierda, pasada una granja de vacuno, siguiendo los postes indicativos del parque pasa por un vallado para vacas, que en manadas pastan por esas alturas de los 1.000 metros. Al pasar este corral, 200 metros más arriba tomar la pista forestal a izquierda y en menos de 1 kilómetro donde es planicie se tomará a la derecha por otra pista herbosa en la penillanura entre el brezal, y al cabo de un par de km. avistando los penedos como no hay señalización del parque tomar en la dirección hacia los cercanos penedos, ya descritos y siguiendo las instrucciones anteriores ganar los Penedos de Anamâo por donde más franco sea el acceso, yendo prácticamente sobre el roquedal que nos da acceso a los Penedos de Anamâo. La vuelta tal cual se describió pasando por el dolmen da Moura-Cortes de Carballeira y bajando de éstas, al pasar el riachuelo, tomar la pista a derecha y a 300 metros estaremos en el lugar donde dejamos el auto. Lo mejor es andar por referencias en estas alturas pues el paso es franco por lo ralo del brezal.

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