Pocas veces ha salido peor parada en las encuestas la política ni se han dado tanto la mano las predicciones demoscópicas y lo que se palpa en la calle, del CIS a los sondeos de intención de voto que encargan los partidos y los medios de comunicación, los políticos aparecen, bien como el tercer gran problema del país o bien como la tercera gran preocupación de los españoles, que no sé que es peor... Una y otra vez, desplazando a 'fijos' como ETA o la vivienda, e inmediatamente después de las dos superprioridades nacionales desde que echó a rodar la crisis, como son el paro que no cesa y el deterioro de la situación económica. La última de ellas, publicada el domingo por La Vanguardia, tiene el valor añadido de que fue realizada una semana después de la reciente remodelación del Gobierno. Viene a concluir que, si la cosa va de 'maquillaje', como se malicia la oposición, se olviden, porque no ha 'colado'
Un año y medio es una eternidad en política, ya se ha dicho, nada se puede dar por hecho, pero analistas y partidos coinciden en que, se venda como se venda el Gobierno, si la economía no remonta y está tirando del empleo cuando se abran las urnas, Zapatero tiene asegurada la debacle electoral, y que con los datos de hoy, la remontada sería un milagrito. Si tal augurio cambiaría con un cambio de líder, que Zapatero no se presentase a la reelección, es la incógnita sin despejar de la ecuación. La credibilidad es un bien más fácil de ganar que de conservar, cuando defraudas a quien te la ha otorgado, se acabó. Inspirar confianza es el secreto del éxito en política, perderla un pasaje al fracaso. Y la credibilidad del presidente Zapatero está en caída libre en las encuestas y en la calle por ocultar la crisis, y amenaza con arrastrar hasta su más baja cota electoral el voto al PSOE
Que Rajoy no anda mejor en popularidad que su rival, como responden los socialistas, es cierto, y un fijo de esta quiniela. Pero no vale como consuelo. Se ha explicado mil veces por qué, Rajoy sale peor porque no cae simpático más que entre los suyos (y no todos), los demás partidos le detestan, mientras que Zapatero 'pesca' en todos los caladeros del arco parlamentario menos los del PP. Credibilidad no es igual que popularidad, hay que añadir, la 'impopularidad' de Rajoy no solo no arrastra a su partido hacia el abismo, la distancia que le saca del PP 'de Rajoy' al PSOE en la encuesta que comentamos es de diez puntos, a solo un escaño de la mayoría absoluta. Puestos a fiarse poco de los dos, los encuestados se fían menos del socialista que del popular, esto es para mí lo relevante. Presentar al país un plan anticrisis completo y factible es, por resumir, lo que todo indica que le falta a Rajoy para consolidarse como alternativa.
