Opinión

Coche para todos

Me refiero al coche eléctrico, que según Europa es el futuro que permitirá reducir las emisiones de CO2. Los precios que tienen en estos momentos no están al alcance de cualquier bolsillo. ¿Quizás la supresión de los coches está dentro del objetivo de que cada vez seamos menos ricos? Hay que utilizar el tren, los nuevos trenes Avril de Talgo tienen una capacidad de 600 personas.

Ante la falta de energía eléctrica me pregunto cómo se van cargar los coches eléctricos, ¿en viajes largos con consumo de baterías habrá que espera en las filas, y cuánto? Son problemas que se plantean muchas personas antes de comprar. Hay una transición hasta que todo sea eléctrico: el híbrido. Por el momento los coches de segunda mano han subido una media de 5.000 euros.

La gran ventaja con la que están “vendiendo” el automóvil eléctrico es que no contamina, incluso acústicamente. Ferrari ya tiene su deportivo eléctrico, tiene miedo de ponerlo en el mercado porque su motor no “ruge” como los clásicos de la casa. Sí contamina, lo que sucede es que no lo hace durante la conducción, pero sí antes y después. Según el Departamento de Energía de EEUU, el CO2 producido es: “21,3 Tm durante la obtención de electricidad; 5,2 Tm en fabricación de baterías, y 0,6 Tm en el ensamblaje del vehículo”. También es verdad que datos similares los encontramos en la fabricación de cualquier otro. La energía, como todo en el mundo actual, es muy importante, de hecho, por falta de previsión y acontecimientos externos nos están produciendo un déficit grave.

No podemos dejar de lado que las baterías de estos automóviles tienen un gran peso, el cual aumenta según la autonomía. Las tenemos de 100-150 kg y, las de mayor autonomía, de 380-550 kg. La composición es otro de los problemas. Contienen elementos perjudiciales para la salud: Plomo y ácido, iones de litio, níqueles-cadmio, níqueles-hidruro metálico. Sabemos que una pila de mercurio, la típica de botón, puede llegar a contaminar 600.000 litros de agua, mientras que la alcalina contamina 167.000 litros de agua aproximadamente, y una de óxido de plata, 14.000 litros. No quiero pensar qué es lo que sucederá con los aproximadamente 30 millones de baterías, del tamaño de un sofá, que habrá dentro de 10 años cuando las actuales ya no sirvan y haya que cambiarlas.

Te puede interesar