Créanme que tanto a gran parte de los lisboetas como a mí mismo nos produce perplejidad la actitud de la célebre adolescente Greta Thunberg, que llegó a Lisboa tras 21 días en un catamarán. Suena a todo menos a limpieza y claridad en las intenciones de la chica que debiera estar en el pupitre de su colegio estudiando que es lo suyo. ¡Qué gran fracaso el final de la Cumbre! Todo propaganda. Digamos antes de nada que total y absolutamente estamos a favor de todo lo que se haga respecto al cambio climático y la Cumbre de Madrid merecía todo el respaldo de las personas sensatas. Pero tenemos muy serias dudas de que lo llevado a cabo por la niña sea lo correcto. Suena a manipulación mediática y crea la seria duda de quien está detrás de tanta parafernalia.
Greta Thunberg viajó de Lisboa a Madrid en el tren nocturno Lusitânia desde la estación de Santa Apolonia a Chamartín. En el mismo ferrocarril se subió un grupo de activistas medioambientales portugueses, con el objetivo de arropar a la nueva “heroína”. El movimiento Fridays for Future, impulsado por la propia joven sueca de 16 años, es uno de los convocantes de la marcha. Se da la circunstancia de que, cuando el tren llegó a Vilar Formoso, se corta la electrificación al entrar en España y se hace necesario el empleo de una locomotora diésel, al menos hasta Salamanca.
Los pasos de Greta parecían encaminados a dar visibilidad a su propia plataforma. Así, ha causado desconcierto en Portugal, pues al principio anunció que aceptaba la invitación para visitar el Parlamento, pero luego argumentó que no le daba tiempo porque debía apurarse para su traslado a Madrid cundo en realidad ha permanecido dos días en suelo lisboeta alojada en un hotel de cinco estrellas y paseando por la capital. En respuesta a su negativa, el presidente de la República, Marcelo Rebelo de Sousa, canceló su presencia en el acto de recibimiento a Greta. Marcelo, inteligente y sensato, nunca da un paso en falso. Por eso afirmó, después de cancelar su asistencia, que hay gente que denuncia el problema pero se aprovecha de él y nunca propone soluciones.
Hace años un joven francés, también adolescente, propuso soluciones y en concreto para el reciclaje del plástico sin tanta parafernalia que a todas luces parece manipulada. ¿Quién está detrás de todo este montaje? Todo muy oscuro. Y todo lo tiene muy estudiado, además de las incógnitas sobre su llegada a la capital, los medios de comunicación esperaron durante una hora antes de la rueda de prensa para que, cuando la joven apareció, todo estuviese perfectamente organizado sin imprevistos. Su llegada a Madrid ha sido caótica, con alrededor de una treintena de periodistas, fotógrafos y cámaras de varios países, con incidentes en los que incluso hubo presencia de agentes de policía.
Greta rechazó el avión por la emisión de gases contaminantes y, tras descartar un vehículo eléctrico y recibir ofertas tan llamativas como la posibilidad de cubrir los 625 kilómetros que separan las capitales ibéricas en burro, se inclinó por llegar a Madrid en el tren nocturno. Participó en el acto “Niños y jóvenes ante el cambio climático”, junto a la ministra de Educación en funciones, Isabel Celaá; la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, y la directora ejecutiva de Unicef, Henrietta H. Fore.
Todo muy oscuro en un tema tan sumamente importante como es la Cumbre sobre el cambio climático. Y el final, decepcionante, como dijo Guterres.
