Opinión

El Foro Económico de Galicia progresa

A estas alturas, tal vez no se sabe bien qué será en el futuro el Foro Económico de Galicia pero lo que sí parece cada vez más probable es que será algo importante en la débil sociedad civil de Galicia. Por varias razones. La primera, que aglutina inteligencia económica de las tres universidades del país en un clima de armonía y equilibrio; incluso ideológico, aunque siempre sea posible enriquecer su pluralismo. La segunda, que suma a importantes empresarios, bajo el criterio de que sean los dueños los que participen, no sus ejecutivos. Y la tercera, que va haciéndose un hueco en la agenda mediática del país, no solo porque integra periodistas económicos en su seno, sino por el fruto de sus trabajos y debates.

La presencia en el foro de este año del catedrático de Economía Aplicada Antón Costas, el primer presidente del Cercle d’Economia de Barcelona que no es un directivo o un empresario, parece todo un aval a la gestión del catedrático Santiago Lago al frente del Foro Económico de Galicia.

Si bien Ourense no es la provincia líder de Galicia, son dos personas estrechamente ligadas a Ourense las que mueven el Foro Económico de Galicia: el empresario Emilio Pérez Nieto y el ya mencionado catedrático del campus ourensano Santiago Lago.

¿Logrará ser el Foro Económico de Galicia algo equiparable al Círculo de Economía de Barcelona? Es difícil saberlo, máxime cuando la realidad económica y política de Cataluña y la de Galicia son tan distintas, igual que su historia. Pero fenómenos como la multinacional gallega Inditex –por cierto, todavía ausente en el Foro- prueba que no hay cada nada imposible en economía.

El Círculo de Economía de Barcelona nació a finales de los años 50 del siglo pasado en busca de dos anhelos: la democracia y el europeísmo. Y a medida que iba creciendo fue incorporando profesores, profesionales y empresarios. Hoy es uno de los lobbies más influyentes no solo de Cataluña sino de España y, como prueba de la madurez de la sociedad catalana y de su capacidad de integración de talento, está presidido por un gallego de Vigo: Antón Costas, sin duda una de las grandes personalidades que dio Galicia al mundo de la economía y de la Universidad.

Un foro de este tipo no debe caer en la política partidaria pero no por ello debe ser ajeno a lo que pasa, de modo que puede tener criterios y expresarlos en libertad, sin ataduras. Del mismo modo, debe saber integrar las grandes corrientes universitarias, económicas, empresariales y políticas. La presencia del ex presidente socialista y catedrático de Economía Fernando González Laxe no es, por tanto, irrelevante, del mismo modo que no pasa inadvertida la entrada en el foro del catedrático Pedro Puy, el dirigente del PP de Galicia de mayor talla intelectual.

Si Amancio Ortega fuese catalán sería difícil que no estuviera en el Cercle d’Economía, pero aquí todos sabemos las dificultades que plantea que la tercera fortuna del planeta haga realmente algo grande por su país de acogida, más allá de todo lo que hace, sobre todo en materia de empleo, que también tiene su valor y su importancia. Algo grande –para situarnos mejor- es lo que hacen, por ejemplo, Warren Buffett o Bill Gates, dos fortunas de un nivel equiparable a la de Amancio Ortega, cuyas donaciones se miden en miles de millones de dólares y no en miles de euros. Para que quede más claro.

Te puede interesar