Opinión

Nuevos tiempos, nuevo tipo de actos

Otra de las consecuencias del covid es cómo afecta a nuestro devenir cotidiano en lo que atañe a la participación en la vida social, especialmente en el ámbito sociocultural-espectáculos como cine, teatro, conciertos, exposiciones, etc-. Las nuevas normas contempladas en eso que eufemísticamente el Gobierno ha denominado “nueva normalidad”-ya hemos escrito que no deja de ser una absoluta redundancia-, obligan a una serie de medidas de índole profiláctica o preventiva que condicionan la organización y celebración de esos eventos.

De esta manera, hay que considerar una serie de circunstancias en cuanto a la gestión de actos abiertos al público y todavía más en función de si éstos se celebran en espacios cerrados o al aire libre contemplando las medidas de distanciamiento de seguridad en salas, pabellones y espacios de acuerdo al aforo definido y delimitando zonas entre pasillos para la circulación de asistentes. Lo mismo en cuanto a prever colas de acceso que estarán debidamente marcadas y en ocasiones disponiendo de catenarias o cintas separadoras y en algunos casos la implementación de sistemas de conteo de personas y control de acceso-tanto automáticas como manuales-.

Es obvio, por otro lado, que los asistentes a cualquier acto, han de disponer a la vista de las normas que han de observar en todo momento y sobre todo las que son obligatorias como sucede con las mascarillas y advirtiendo a propósito del cumplimiento de los protocolos de higiene y distancia de seguridad y la aplicación del derecho de admisión para el supuesto del incumplimiento de dichos protocolos.

Y si ese acto incluye un servicio de catering, también su operativo está pautado, pues debe prestarse en condiciones de seguridad, evitando la presentación a granel de los productos o cualquier forma de disposición que no evite el contacto entre participantes recomendándose el formato en porciones individuales (pack-lunch), productos estuchados/empaquetados; cafés e infusiones servidos en vasos desechables cerrados dentro de un buffet atentido por personal.

Los nuevos tiempos postcovid contextualizan cualquier evento cuando es presencial, pues limitan aforos que condicionan la propia naturaleza del mismo y el público asistente tiene que participar mentalizado respecto a que debe observar una serie de pautas preventivas y que en muchos casos afectarán a su relación intersocial con otras personas. Digamos que condiciona la propia calidez intrínseca del acto.

Es indudable que necesariamente será una etapa de transición que no se sabe por cuanto tiempo se va a prolongar, pero mientras tanto, es preciso que cada uno respete estas nuevas normas y pautas sociales de convivencia. 

Te puede interesar