Opinión

La reina ha muerto, larga vida al rey


La noticia ha conmovido a la opinión publica de todo el mundo. La reina longeva, al poco tiempo de haber conmemorado su Jubileo de Platino, cumpliendo siete décadas como Reina de Inglaterra y convirtiéndose en la única monarca que ha vivido esta celebración, ha fallecido.

A partir de ahora, su hijo, Carlos III de Inglaterra, sucederá a Isabel II. ”Lloramos profundamente por la muerte de una soberana muy querida pero una madre también muy amada. Sé que su muerte será muy sentida en todo el país, las monarquías y toda la Commonwealth, y por incontables personas alrededor del mundo. Durante este periodo de luto y cambio, mi familia y yo nos consolaremos y seremos confortados por la conciencia del respeto y el profundo cariño con el que la Reina será recordada”. Así ha expresado el sucesor al trono.

La vinculación de la Familia Real española hay que recordar que los Borbón y los Windsor son familia a través de la reina Victoria Eugenia, esposa de Alfonso XIII, quien era nieta de la reina Victoria de Inglaterra. Asimismo, el duque de Edimburgo era primo lejano de la reina Sofía. “Su sentido del deber, compromiso y toda una vida dedicada al servicio del pueblo del Reino Unido e Irlanda del Norte fue un ejemplo para todos nosotros y permanecerá como un legado sólido y valioso para las generaciones futuras”, ha dicho nuestro monarca aludiendo a la figura de Isabell II a quien el rey Felipe VI llamaba cariñosamente a Isabel II “tía Lilibeth”.

A partir de ahora, se activa la operación “London Bridge”, el protocolo que activa si muere la Reina Isabel II. Es una serie de documentos que se describe en su totalidad, detallando desde cómo se compartirá al público la noticia del fallecimiento del monarca hasta cómo ascenderá al trono el rey Carlos III. Se contemplan los 10 días posteriores a la muerte de la Reina, incluido dónde irá su ataúd y cómo Carlos III pasará sus primeros días como rey.

Todas las familias reales lloran la pérdida de Isabel II. Su muerte significa un acontecimiento histórico dentro de la familia real británica, pero también más en lo que atañe a la realeza europea, después de setenta años en el trono que convierten su reinado en el cuarto más largo.

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