Opinión

Defender la tauromaquia

Sospecho que a los actuales dirigentes de la RTVE les cayó en la coronilla el rayo verde cuando, asomados a uno de los programas franquicia de su actual programación, asistieron aterrados a la proclama pronunciada por Estrella Morente a favor de la tauromaquia. En un tiempo en el que la fiesta de los toros ha sido literalmente borrada de las actividades propuestas por las entidades de información públicas e incluso privadas –recuérdese que se ha despedido fulminantemente de la cadena SER al periodista Manuel Molés que ha conducido y dirigido un espacio taurino en sus ondas durante cincuenta años- la presencia de la gran cantaora granadina iniciando su actuación en el espectáculo televisivo “Operación Triunfo” con una canto largo y prolongado en defensa de la fiesta, ha debido resultar un auténtico bombazo. RTVE está hoy regida por un órgano cuya fracción mayoritaria está en manos de la izquierda y en el que es dominante la presencia de Unidas Podemos. Por tanto, un consejo rector ampliamente definido por su fidelidad a la causa animalista y enemigo declarado de la tauromaquia. La propia Rosa María Mateo, que llegó para cubrir un corto periodo de interinidad hasta en tanto no se establecieran las bases del concurso público que definiera el nombramiento del responsable del ente y ahí sigue, se habrá desmayado asistiendo al dramático llamamiento de la intérprete que, si bien goza del natural beneplácito de la cadena y sus regidores por su inclinación política nunca disimulada, en esta ocasión le ha dado a ella la cena y al resto, el té con pastas.
Personalmente reconozco que también me asombré por un episodio al que atendía por otras razones distintas. Quería calibrar cómo puede compatibilizarse un tango de los más representativos con los ritmos del flamenco que Morente tan bien trabaja. Nunca me han gustado estas atrabiliarias mezcolanzas y ayer tampoco. Pero todos esos juicios de valor perdieron su trascendencia cuando la cantante se marcó una soflama pro taurina de tomo y lomo. Por lo demás, la voz de Morente brillo sobre un tono mayoritariamente mediocre. Si no solo desafinan los concursantes sino que también lo hacen las estrellas invitadas –la gallega Miriam Rodríguez, en plan leona con una Gibson al cuello, desafinó como una hiena- apaga y vámonos.

Te puede interesar