Opinión

Piensa y conspira que algo queda

El momento que vive España se presta a hablar de conspiraciones ocultas y más cuando en todo este recorrido hemos visto a  aventureros que han alcanzado plaza de conquistadores. Intrigar viene en el ADN del ser humano, por eso la historia alberga documentación que lo ratifica a raudales. El individuo  se ha unido a  otros a lo largo de la vida para conseguir objetivos, y no siempre malos objetivos, como demostró ser la huelga de Tebas, la primera de la historia, entre los trabajadores de las tumbas reales. Aquella sentada a grito de “Tenemos hambre” hace entender la respuesta contra la corrupción y la mala administración que llevaron a los obreros a  ocupar los edificios claves de la administración de Ramsés tercero en el siglo XII antes de Cristo.

Es de tener en cuenta el refranero popular que habla de “A río revuelto ganancia de pescadores”, porque  el barullo difumina el escenario de confabulación. 

El tema de la conspiración está en la mente de los lectores habituales de prensa, de Twitter y de otras redes sociales. La última entrega ha contado con la alfombra roja del Congreso de los Diputados, por petición del PSOE, para eliminar de forma gradual el dinero en efectivo. La primera propuesta de esta Proposición no de Ley consiste en rebajar de 2.500 a 1.000 euros los pagos en metálico. Se había planteado ya en 2019 y la decisión vendría a favorecer a las firmas de medios electrónicos. 

Pagar en mano es hoy un motivo de persecución por los diferentes poderes como instrumento de posible fraude fiscal y más perseguido desde que  el covid-19 nos ha obligado a ponernos guantes para evitar el virus. Una tarjeta plastificada tiene todas las de ganar frente al papel. En este combate, llevando la contraria a la lucha social de invasión del plástico que asfixia el planeta, y promete más de este material que animales acuáticos, desprende apuesta  ganadora del contaminante elemento.

La sugerencia parlamentaria  ha levantado toda una campaña de conspiración contra  la libertad del individuo ante una posible abolición del dinero en efectivo.  La anulación del papel provocaría la digitalización de las clases más desfavorecidas, la expropiación sería posible a toque de pulsar un botón del ordenador y las tasas y aumento de impuestos  se deducirían más cómodamente. Las redes sociales difunden más que las televisiones esta información y no es casualidad que  hoy los equipos de investigación estén en el baúl de los recuerdos, ese que está cerrado con llave en las redacciones actuales de los medios de comunicación.  La teoría de la conspiración camina paralela a nuestras vivencias y ha estado presente en grandes acontecimientos: asesinato del presidente Kennedy, la muerte de lady Diana, 11S, el sida como creación de laboratorio, 11M,  el coronavirus...

La sociedad secreta Los Illuminati y el Nuevo Orden Mundial  podrían alinearse en el saco de muchas de las conjuras españolas. Conspirar es hoy parte de la filosofía de tener los pies en la tierra. De aventureros a conquistadores hay más de una y de dos connivencias. Conspira que algo queda; pero no olvides pensar.

Te puede interesar