Opinión

Precio financiado

Estamos tan acostumbrados al lenguaje de lo absurdo que ya no nos llama la atención ver un letrero con el precio de un coche, por ejemplo, que diga; 22.000 euros, y de bajo; financiado, 20.000 euros. A simple vista esto es una incongruencia, un absurdo, una aberración, pero todo tiene su explicación, tiene su truco, pero no nos lo explican. Estamos en la época de la mezcla de conceptos, del engaño, de la distracción de los verdaderos objetivos para que sigamos sin entender de qué va la cosa. Porque, a bote pronto, lo primero que surge ante este letrero es hacerse una elemental pregunta. ¿Cómo es más barato este coche si lo compro financiado? Obviamente es mentira, vamos a pagar más dinero si lo pagamos aplazándolo en cuotas mensuales a dos, tres, cuatro o años, como es lógico, porque esta es la clave, al final de la progresía, de las vanguardias, de las realidades virtuales, versos, metaversos, criptos y demás inventos, se impone la lógica, lo normal, lo fungible, lo de siempre, la puñetera realidad.

Porque la realidad existe, no es imaginaria, no es progresista, no es de izquierdas ni de derechas; existe el hambre, existe la miseria, existe la muerte, pero mientras no llegan estas verdades nos vamos entreteniendo con otras historias tratando de justificar conductas, disimular beneficios y pretender reconocimientos. Porque esto de ir de chachis modernos preocupados de cosas raras, y de tíos/tías extraños/as/es, está muy bien y además, suele tener buena prensa, pero al final las cosas funcionan a base de gente seria, generalmente curritos, que están en sus puestos, que son puntuales y trabajadores, que te solucionan los problemas de cada día, te curan en los hospitales, te sirven en los mercados y en las gasolineras, apagan los fuegos en el monte, limpian las calles y te arreglan las averías de tu coche y de tu casa. Es decir, gente normal y sencilla que trata de llegar a fin de mes de la mejor manera posible sin dar el coñazo y sin incordiar. Es así como funciona el país, tu región, tu pueblo, tu ciudad, tu vida. Muchas gracias, queridos héroes anónimos que ni os dais cuenta de que lo sois.

 Esta modernidad y progresía empezó en los tiempos del progre Tierno Galván. ¿Se acuerdan? “El que no esté colocado que se coloque y al loro”, pero después necesitamos de personal que no estén colocados, mira tú, de conductores que estén muy despiertos, en forma y que nos lleven en el autobús, en el tren o en el avión a nuestros destinos, de dirigentes que sepan de que va el orden, la economía, la salud, de maestros, ingenieros, obreros o mecánicos que estén preparados y que sepan resolver nuestros problemas cotidianos que son muchos y muy variados. 

Y después, explicar de qué va el truco del almendruco, que tampoco es tan difícil, en un sistema de economía de mercado, las empresas tienen que ganar dinero, si no se cierran y punto, si vendiendo un coche no hay margen, se vende el dinero, de ahí que parezca más barato, Pasa algo parecido con el precio de la luz. ¿Cómo no va a subir su factura, si a los precios del gas y demás agentes que la producen, tenemos que sumarle los gastos de explotación de las empresas que nos la facturan y entre ellos, en gran medida, las gruesas nóminas de los altos cargos que en su gran mayoría proceden de las puertas giratorias de los políticos de turno? 

Son unos ladrones, no me cobre comisiones, no me cobre el mantenimiento de la cuenta, no me… y el banco se cierra, simplemente. 

Habrá excepciones, pero muchos viejos, somos tontos.

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