El presidente del PP, Pablo Casado, ha propuesto la modificación urgente de la Ley Orgánica de Medidas Especiales en materia de Salud Pública de 1986 y la Ley Orgánica de Jurisdicción Contencioso Administrativa, para poder confinar y actuar de forma coordinada y con un mando único sanitario ante la nueva oleada de contagios, sin tener que recurrir al estado de alarma. No sé si recuerdo bien, pero cuando de una forma sibilina el PP animaba a las manifestaciones callejeras contra el Gobierno por las prórrogas del estado de alarma lo hacía en defensa de las libertades que, decían, Pedro Sánchez conculcaba y que llevaban a España a ser un estado bolivariano. Decían que para dar cobertura jurídica al confinamiento bastaba con la primera de las dos leyes que ahora quieren modificar por la vía rápida. O sea, que el líder del PP propone ahora recortar los derechos ciudadanos por otros medios, sin paso previo paso por el Congreso en seis ocasiones. Como se enteren los de la calle Núñez de Balboa le van a montar una manifestación en la calle Génova.
