Que una determinada decisión del adversario no debe estropearte una campaña política está en todos los manuales de ciencia política aunque haya que retorcer los argumentos. La derecha asegura que el Gobierno socialista va a congelar las pensiones a pesar de que ha dicho por activa y por pasiva que las revalorizará en el momento en el que se encuentre “en pleno uso de su capacidad propositiva y normativa", y que tendrá carácter retroactivo. ¿Dónde está la congelación? Pablo Casado se va a tener que dar mucha prisa para recurrir esa decisión del Ejecutivo en funciones ante el Tribunal Constitucional no vaya a ser que llegue antes la investidura de Pedro Sánchez y el primer consejo de ministros antes que el escrito ante el Alto Tribunal. Y habría que haber escuchado las lindezas que hubiera recibido el Gobierno si se le ocurre adoptar una decisión de tanta importancia como la subida de las pensiones, o la del salario de los funcionarios, o la del SMI, estando en funciones.
