Las elecciones del midterm, todo un plebiscito sobre Donald Trump, coinciden con el inicio de la publicación de las memorias de Michelle Obama y su gira por el continente africano. Además de conocer sobre el terreno el trabajo de varias organizaciones no gubernamentales, se entrevistará con dirigentes políticos, líderes sociales, mujeres que luchan contra la discriminación … y promocionará el libro en el que se pone de manifiesto su inquietud por los problemas más acuciantes que hoy vive el mundo y cómo se volcó con los más desfavorecidos durante los años que se mantuvo su marido en la Casa Blanca.
Las elecciones del midterm en las que se renuevan parte del Senado y de la Cámara de Representantes, eran también un plebiscito para el Partido Demócrata, al que preocupa que dentro de un año se iniciará la campaña para las presidenciales sin que aparezca una figura ilusionante que pueda vencer a Donald Trump. El presidente se ha volcado en conseguir dar la vuelta a las encuestas que auguraban que los republicanos no saldrían bien parados de las elecciones que se celebran en la mitad de la legislatura, pero uno de los aspectos que más ha sorprendido en el clima previo a la contienda del midterm ha sido la aparición de numerosas mujeres, tanto del partido republicano como del demócrata, que se han lanzado a la arena política dispuestas a competir con los varones para conseguir escaño en el Capitolio y, por qué no, intentar la carrera por la Casa Blanca.
Se trata de mujeres de distinta trayectoria, jóvenes y de media edad, que han comprendido que Hillary Clinton marcó el camino y por primera vez una mujer estuvo a punto de convertirse en presidenta; no lo consiguió, pero es opinión generalizada que fue víctima del juego sucio de Trump con la colaboración de los rusos. Por otra parte el movimiento Me Too, cuyos inicios fueron la denuncia de que muchos hombres han presionado n sexualmente a las mujeres que pretendían destacar profesionalmente, se ha convertido en el ariete que demuestra a las mujeres que pueden llegar tan lejos como se propongan aunque los hombres intenten poner obstáculos.
En ese impulso femenino, a nadie se le escapa que Michelle Obama cuenta con características excepcionales para destacar. Fue un apoyo importante de Hillary, al igual que su marido, y ha calado la idea de que, con su libro y su frenética actividad social, puede estar aspirando a volver a la Casa Blanca. No como Primera Dama sino como Presidenta.
