Felón, traidor, malnacido, desleal, infame, falso, mentiroso, perverso, dictadorzuelo, malo, perjuro, ladrón, malvado, protervo, ruin, bellaco, execrable, nefasto, penoso, cismático, malquisto, falaz, miserable, odioso, flaco, pobre, pernicioso, virulento, dañino, taimado, zorro, maula, malasangre, vicioso, maligno, demonio, inicuo, enfermo, abusador, depravado, comemierda, vil, frustrado, bellaco, egoísta, tramposo, perdedor, bajo, bribón, pirata, aborto, ingrato, aciago, malsano, nocivo, bajuno, indigno, críacuervos, desmedrado, mezquino, roñoso, cabrón, rufián, estafador, basto, rencoroso, grosero, chantajista...
O como diría la gran Paquita la del Barrio, más precisamente y por simplificar en su famosa canción Rata de dos Patas: "Rata inmunda, / animal rastrero, / escoria de la vida, / adefesio mal hecho, / infrahumano, / espectro del infierno, / maldita sabandija. / Cuánto daño me has hecho, / alimaña, culebra ponzoñosa, / deshecho de la vida. / Te odio y te desprecio, / rata de dos patas. / Te estoy hablando a ti / porque un bicho rastrero, / aun siendo el más maldito, / comparado contigo se queda muy chiquito, / maldita sanguijuela, / maldita cucaracha / que infectas donde picas, / que hieres y que matas."
Todo esto lo pongo aquí sin ninguna acritud, tan solo por contribuir desde mi humilde persona al enriquecimiento del lenguaje de Pablo Casado, Albert Rivera y su amiguito Santiago Abascal que últimamente tienen serios problemas para encontrar adjetivos que ponerle a Pedro Sánchez, un tipo que por cierto si no me equivoco creo que sigue siendo nuestro presidente y el de ellos. Al menos de momento.
El grado de bajeza dialéctica al que están llegando últimamente esos próceres de nuestra derecha (¿se dice así o se dice extrema derecha?) en los medios de comunicación y en sus soflamas es sencillamente insoportable. Y eso que seguro que los tres fueron a colegios de pago. Claro que eso no significa nada, conozco a algún cabrero extremeño que nunca fue al colegio y habla mucho mejor que ellos.
Yo ni soy del PSOE ni me interesa el PSOE para nada y no quiero hacer aquí, ni que se interprete así, una defensa de Pedro Sánchez ni mucho menos, sino como he dicho más arriba tan solo una defensa del lenguaje. De nuestro precioso lenguaje español. Pablo Casado, Albert Rivera y Santiago Abascal que tanto se las dan ellos de españoles o de superespañoles tienen que hincar los codos un poco más, ponerse a estudiar y leer algunos diccionarios para aprender a insultar bien en la lengua de Cervantes. Les recomiendo un diccionario del que ya he hablado por aquí alguna vez hace tiempo: "Tesoro de Villanos" de María Inés Chamorro. Es un diccionario de germanía de los siglos XVI y XVII. En su bonita portada plateada tiene grabado este texto explicativo y/o introductorio: "Lengua de jacarandina, rufos, mandiles, galloferos, viltrotonas, zurrapas, carcaveras, murcios, floraineros y otras gentes de la Carda."
Pues eso. A ver si estos chicos se ponen a leer de una vez, que ¿saben ustedes? tienen mucho que aprender.
