Opinión

Ourense u Orense, juzgue usted

Como ourensano de nacimiento y desconocedor de la realidad diaria de Serenou como la llamó alguien una vez a esta ciudad, evito escribir sobre ella ya que no sé casi nada sobre ella. Me largué de aquí de adolescente y no he vuelto en cuarenta años salvo en rápidas visitas ocasionales y/o familiares. O sea, que soy un ignorante perfecto sobre este tema. Un ignorante de libro.

Hace unos días cometí el error de meterme en una conversación en internet que no me interesaba en absoluto. Un conocido publicó una noticia del ABC (un periódico que yo suelo leer con todas las precauciones del mundo en estado de prevengan) en la que se explicaba en detalle el rarísimo funcionamiento económico de Democracia Ourensana.

Pues bien. Resultó que a todos los participantes del chat solo les interesaba si se decía Ourense u Orense, y no el tema de la noticia que era el alcalde y su manejo de los dineros públicos, o de los dineros de sus concejales, o de los dineros que fueran. Un tema, el del manejo de los dineros, para el que resulta intrascendente que se diga Ourense o que se diga Orense.

El caso es que yo y algún participante más del chat (pocos) señalamos que Orense es perfectamente correcto en castellano como Lérida, Burdeos o Londres, en lugar de Ourense, Lleida, Bordeaux o London, pues su uso histórico en dicha lengua, el castellano, ha acabado por acreditarlo así, fueran cuales fueran los orígenes de eso en cada caso. 

Pero hubo bastantes personas que se enfadaron mucho con esa idea, negando a los castellano hablantes el empleo del topónimo Orense. Yo trabajé un tiempo en Nueva York. ¿Debería decir siempre New York, Nueva York o Nova Iorque si hablo en inglés, en español o en gallego respectivamente?

He de señalar que como soy básicamente castellano hablante aunque bilingüe, yo suelo emplear casi siempre Ourense y ourensano cuando escribo en español. Pero lo hago solo por gusto y porque he nacido aquí. No porque sea obligatorio ni porque las versiones en castellano Orense y orensano sean incorrectas, ni mucho menos.

Al final lo dejé porque el asunto era una pesadez y casi nadie parecía captar que inicialmente hablábamos del alcalde de Ourense y sus dineros, y no de si se decía Ourense u Orense. Siento repetir tanto Ourense y Orense, ustedes perdonen, pero el tema es el que es, no me deja otra.

Mi última intervención antes de cortar en dicho chat disparatado fue esta dirigida a una chica muy combativa, y la escribí intencionadamente en el más puro estilo del regidor ourensano: "Mira, nena, la única diferencia entre un tonto gallego y un tonto español, es el sitio en que nacieron. Por lo demás son iguales."

Como dice un pariente mío, Kike Cruz, un agudísimo analista político con una frase que por cierto es el título de su podcast semanal radiofónico en San Juan (Puerto Rico): "Juzgue usted". 

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