Opinión

Es la idea, idiota

En el abrevadero andan todos revolucionados. El grupo Comar, que dirige José Collazo Mazo, acaba de instalar una máquina de apuestas y el personal alucina con los colorines. El dueño del bar está jodido porque la ley dice que puede tener una máquina de apuestas en el interior pero no puede anunciarla en el exterior. Sólo se pueden publicitar en las casas de apuestas. No entiende nada de la normativa gallega, máxime cuando en Madrid se va a permitir fumar en Eurovegas, pero la norma está para ser cumplida.

Arsenio, el camarero de la noche, sin embargo, ha cambiado su punto de gravedad y ahora consume las tardes viendo carreras de caballos y otras gaitas a las que la peña apuesta con desmedido afán.

Llegó Germán, que regenta una gestoría, y comentó como un buen día Collazo le preguntó a su padre si quería entrar en un negocio sencillo. La idea consistía en esparcir unas cuantas máquinas tragaperras en algunos garitos coruñeses. El padre de Germán, con un criterio aplastante, pensó que una sociedad acostumbrada a estar siempre de paseo y de domingo no se atrevería a acercarse a una máquina para jugarse la pasta, la pensión e incluso los ahorros familiares. Comar posee más de 30 casinos por todo el mundo y un gran negocio con las tragaperras. Evidentemente, el padre de Germán, que en ese momento sí tenía en efectivo las 500.000 pesetas, 3.000 euros de ahora, para meterse en el negocio, cometió la equivocación de su vida.

'Ya sólo falta que pongan la maquinita en las oficinas de empleo y en los ambulatorios. Se forrarían', comentó uno de los miembros de la Santa Sede del Abrevadero. Será cuestión de tiempo.

Está claro que como esperemos a que nuestros gobernantes sean capaces de alumbrar una idea brillante para rescatarnos del pozo, vamos apañados. Cada consello de la Xunta y cada debate parlamentario vienen a indicar que son instituciones prescindibles a pesar de la retórica que le ponen al asunto. Ahí no hay muchos boletos con premio. No es la economía ni la política, que también deberían serlo. Es tener una idea, idiota.n

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