Los hierbajos que intentan recuperar el espacio invadido por aceras y asfalto han generado en A Coruña un enfrentamiento entre el anterior gobierno municipal y el actual. El PSOE ha decidido prescindir del uso de vinagre por el que se apostó desde 2016 para combatir las malas hierbas, aunque quizá sería más correcto calificarlas de antiestéticas, y Marea Atlántica recuerda el riesgo para la salud de herbicidas tóxicos como el glifosato. Mientras el ejecutivo que comanda Inés Rey busca alternativas a un producto que puede resultar cancerígeno y afectar sobre todo a los animales de compañía, el equipo que gobernó la ciudad hasta el pasado mes de mayo recomienda ahora una opción con garantías sanitarias y ecológicas: un equipo de diez operarios armados con desbrozadoras para arrancar las malas hierbas de raíz.
El asunto puede parecer menor, pero el verdín y los hierbajos en las aceras puede cambiar el voto de muchos barrios. La fórmula del vinagre para actuar en 36 kilómetros cuadrados se ha mostrado igual de eficaz como cuando se trata con el mismo remedio los piojos en un escolar. Como no se retiren a mano las liendres, el parásito regresa a hacer la puñeta. La propuesta de una cuadrilla de operarios currando en la limpieza de las calles y medianas resulta inobjetable, y más en un día en el que los datos del paro en agosto han vuelto a encender las alarmas sobre la deriva del mercado laboral, pero en la idea deslizada hace un par de semanas se incluye la desbrozadora, no vaya a ser que retirarlas a mano suponga demasiado esfuerzo y ni siquiera haya candidatos para ocupar el puesto.
Un estudio de la Gasol Foundation alerta de que el 35% de los niños y adolescentes españoles padecen obesidad. Ya engordamos a la misma velocidad que Estados Unidos y somos el segundo país europeo en la báscula juvenil tras Reino Unido. El 25% de la población españoña es obesa y 131.000 personas la diñan al año por lo que se considera la pandemia del siglo XXI. Los chavales no practican las horas de deporte aconsejables para un desarrollo saludable y en cambio se pasan más de tres horas al día sentados delante de una pantalla mientras las posaderas se hacen ingobernables como los hierbajos en las aceras.
