La Policía Nacional continúa revisando el material intervenido en el bar Novo, situado en el número 23 de la calle Colón, en el casco viejo e la ciudad, para encontrar huellas que permitan esclarecer la muerte de su titular, Evaristo Morín Machado, de 65 años, cuyo cadáver fue hallado degollado el pasado 5 de febrero.
Los agentes intervinieron buena parte de los utensilios que utilizaba el hostelero, que fueron remitidos al laboratorio de criminalística del Cuerpo Nacional de Policía, para analizarlos con detalle y encontrar huellas dactilares y el ADN de los autores del crimen.
La investigación la están llevando a cabo los agentes de la Policía Judicial y de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV). Los investigadores, según pudo saber este periódico, consideran que, una vez analizado todo el material, el informe será clave para resolver el crimen.
Pero esta tarea se podría demorar en el tiempo ante la carga de trabajo que está registrando el citado laboratorio.
Mientras, la Policía Nacional continúa con las pesquisas, que se centran en las conexiones que tenía el fallecido con los suministradores de sustancias estupefacientes. Vecinos y comerciantes cercanos de la rúa Colón insistían este miércoles en que Evaristo Morín, más conocido en el barrio como Joaquín, no "trapicheaba" en los últimos años con drogas. "Desde que salió de prisión- cumplió condena por trafico de estupefacientes- cerraba el bar a las nueve de la noche y se marchaba a su casa", apuntó un residente.
Pero esta versión no coincide con los pasos que están dando los investigadores, que ya revisaron movimientos bancarios y los contactos que mantuvo el hostelero en los últimos meses con personas vinculadas a la venta de drogas.
Sin precinto judicial
El bar Novo permanecía este miércoles cerrado, aunque tras la persiana ya no se observaba el precinto policial que impedía el paso al interior de las instalaciones. También fueron retirados los ramos de flores, mensajes y velas que conocidos y amigos colocaron a modo de altar tras el crimen.
Vecinos y comerciantes continúan alarmado con lo sucedido y este miércoles coincidían en exigir la detención de los autores.
Sin pistas sobre el paradero de Nerea Añel Vázquez
La Policía Nacional continúa con las pesquisas para localizar el paradero de la joven Nerea Añel Vázquez, de 27 años, cuya desaparición fue denunciada hace hoy un mes por su madre en la Comisaría de Ourense. Los agentes rastrearon buena parte del barrio de Covadonga, donde fue vista por última vez a finales del pasado mes de enero, utilizando drones en la búsqueda. También "peinaron" los alrededores del motel Cancún (Barbadás) -tambien fue vista el pasado mes de enero en esta zona- pero la búsqueda no aportó resultados positivos.
Los policías mantienen abiertas todas las hipótesis y centran la búsqueda en los lugares que solía frecuentar y en el entorno de las personas con las que solía salir.
