Segundo capítulo de la implantación del nuevo Plan de Transporte con confusión, falta de autobuses, retrasos y saltos de parada en algunos puntos de la provincia. Los mayores problemas se vivieron en los colegios de Seixalbo –adonde acuden alumnos de San Cibrao, Taboadela, Paderne y la ciudad– y Mende, debido a la falta de coordinación en el cambio de titularidad de las líneas Pereiro-Ourense y San Cibrao-Ourense. También se localizaron problemas en el colegio de Cambeo o en Allariz, donde algunos padres tuvieron que llevar a sus hijos en coche.
Algunos niños esperando a 0 grados o padres que no sabían si sus hijos habían sido trasladados fueron algunos de los inconvenientes causados por los "desaxustes", que l a Consellería de Infraestruturas e Mobilidade urgió a las empresas a resolver.
La mañana fue confusa en algunos puntos, un "desastre" según algunas madres, como Nuria Sueiro, del CEIP Seixalbo, o Lara López, madre del colegio de Cambeo. En ambos casos se toparon con conductores que no sabían las rutas, o sin listas de niños: "Mi hijo entraba a las 9,30 y a las 9,20 no lo habían recogido", apuntó López.
"Algún rapaz tivo que quedar toda a mañá na ludoteca de San Cibrao, porque os pais déixanos alí para que os leven á parada e o autobús non chegou", señalaba un padre a las puertas del colegio de Seixalbo, donde 50 alumnos de una línea tuvieron que ir en coche.
Ya por la tarde, a la vuelta, se repitieron los problemas, ya que algunos autobuses no tenían plazas suficientes y otros venían sin acompañante, por lo que algunos alumnos tuvieron que esperar hasta media hora para poder iniciar el regreso.
"No sé dónde está mi hijo", lamentaba una madre de un alumno del colegio José García de Mende tras dejar al chaval a las 8 de la mañana en Tapada de Bouzas (Pereiro), donde el alcalde, Luis Menor, contactó con Xunta de Galicia y empresa y dabe por arreglado el problema por la tarde.
“Algún pai pensou que xa pasara o autobús, pero non"
En Monbús tuvieron un problema personal que afectó a la coordinación de las líneas, según la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade, lo cual causó desajustes en Seixalbo y Mende, en este último caso afectando a dos líneas. También hubo problemas con otras compañías en Cambeo en el CEIP Antonio Faílde, donde no hubo problema en las empresas que continuaban pero sí en las nuevas concesiones.
Una madre, que tuvo que acompañar a la conductora para que pudiese hacer correctamente la ruta a Cambeo, lamentaba que se cambiase en pleno mes de enero, lo que implica "que cambian los ciudadores y los chóferes, y estos no tienen culpa de nada". En Allariz, alguna ruta de CEIP Padre Feijóo no funcionó, "e alí estivemos os pais na parada esperando. Algún pensou que xa pasara...", dice una madre, que anticipa que hoy podría repetirse.
Problemas en varios puntos de la provincia, tras el cambio en Navidad
El nuevo Plan de Transporte entró en vigor el pasado 2 de enero, con los primeros 70 contratos ya en marcha, aunque en el caso de los autobuses escolares lo hizo este miércoles, coincidiendo con el fin de las vacaciones de Navidad. Esto generó contratiempos ya el primer día en el transporte general, pero este miércoles fue mucho más intenso en el autobús escolar.
Además de los casos de Seixalbo, Mende o Allariz, también hubo padres afectados por rutas que no funcionaron en Barbadás –ruta hacia el IES Ferro Couselo– o Celanova, donde durante toda la mañana una ruta sufrió problemas.
En Ribadavia, dos llegaron al colegio con un retraso aproximado de 20 minutos y hacían la línea desde Santo André y desde Beade.
Algunos padres mostraban su comprensión por estos problemas al ser el primer día, pero critican la falta de información y el cambio radical en pleno regreso de las vacaciones de Navidad.
El mayor problema fue para los conductores, que no sabían con exactitud las paradas y que en algunos casos carecían de listas de alumnos, lo que dificultó el proceso de llevar a los niños a su parada más cercana.
El presidente de la Federación Provincias de Anpas públicas (FAPA Ourense) lo ciñó a algunos casos concretos, pero subrayó que en general "no se habían detectado grandes problemas" y confían en que hoy todo sea correcto.
