Preocupación y malestar entre las familias por cambios en los días y horarios de los ALCE en Países Bajos

La comunidad española en los Países Bajos, ha mostrado su preocupación tras el anuncio - a través de correo electrónico - del director de la Agrupación de Lengua y Cultura Españolas (ALCE), el pasado 21 de junio, sobre lo que consideran "cambios radicales" en la estructura de las clases, en concreto en los días y horarios para el curso 2024-2025. Lo que ha motivado que las madres delegadas de los ALCE de Rotterdam hayan enviado una carta de queja al Cónsul General.

Los cambios incluyen el traslado de clases en varias localidades: Alkmaar pasará de lunes a miércoles, Breda de jueves a lunes, Hoofddorp de miércoles a jueves, Rotterdam de miércoles a martes, y Utrecht concentrará sus clases únicamente los martes en lugar de lunes y martes. Además, en ciudades como Alkmaar, Dordrecht, Leidsche Rijn (Utrecht), Maastricht y Rotterdam, aún no se han definido las ubicaciones de las clases para el próximo curso.

En Rotterdam, los padres han expresado su "desazón y nerviosismo", ya que el cambio de clases de miércoles a martes podría obligar a muchas familias a retirar a sus hijos del programa. Esta situación podría llevar incluso a la desaparición de esta aula.

"La ciudadanía en el exterior localizada en los Países Bajos, estamos cansados de escuchar año tras año que la administración no tiene presupuesto para contratar a personal para atender nuestras necesidades. Primero ha pasado con las necesidades consulares de la población española en este país. Ahora, el ajuste de los presupuestos le toca también al personal de ALCE", afirman en la misiva.

La comunidad también enfrenta la incertidumbre debido a la reducción de personal docente. El director Moreno Mellizo informó que el equipo perderá otro profesor en el próximo curso, lo que ha complicado la organización de los horarios y aulas. Este recorte, según informan la colectividad, se suma a la eliminación de un profesor el año pasado, lo que ya había incrementado la carga de trabajo para los docentes restantes.

En realidad, afirman, "nos trasladan el problema a los padres y a las madres, exigiéndonos esta apreciada flexibilidad, sin embargo, la gran mayoría de padres y madres, hacemos ya un esfuerzo de flexibilización para que nuestras hijas, hijos e hijes puedan asistir a las clases. Simplemente, trabajando menos o pidiendo libre las tardes o los días que los niños tienen clases por la tarde o desplazándonos más de media hora para llegar a las mismas".

Las familias han criticado, asimismo, la falta de comunicación y transparencia, ya que los cambios se anunciaron al final del curso sin previo aviso ni consulta con el Consejo de Residentes Españoles (CRE). Los padres consideran que estos cambios afectan significativamente su capacidad para llevar a sus hijos a las clases de ALCE, y se sienten especialmente molestos por la falta de previsión y consulta. "Nos parece muy mal que se haya elegido el final de curso para comunicar estos cambios. Nadie sabía nada, ni durante el curso, ni antes de terminar los exámenes. Ni siquiera se informó al CRE de los Países Bajos sobre todos estos cambios en la reunión que mantuvo el 31 de mayo de 2024 el Director de ALCE junto con el CRE. ¿Por qué esta falta de información?", se preguntan.

En respuesta, la comunidad ha iniciado una recogida de firmas para solicitar a la administración que mantenga al menos el mismo número de profesores que en el curso 2023-2024, realice una encuesta para determinar el día más conveniente para las clases según la ubicación del aula, y contrate más profesores si es necesario para cumplir con los resultados de la encuesta. También piden que se vuelva a la situación previa al curso 2022-2023, recuperando los dos profesores adicionales que se perdieron.

"La falta de previsión y comunicación por parte de ALCE es alarmante. Estos cambios afectan gravemente a nuestra capacidad para garantizar que nuestros hijos puedan asistir a clase", aseguran, mientras que desde la dirección de los ALCE explican las familias - estos ajustes son resultado de restricciones presupuestarias y la necesidad de hacer más eficiente la administración, aunque reconoce las dificultades que esto impone a las familias.

"Si se hubiera tenido en cuenta la idiosincrasia de los horarios de clase de los Países Bajos, podríamos decir que, probablemente, el horario más conveniente para las clases de español serían los miércoles por la tarde. Dado que en los colegios neerlandeses los miércoles duran las clases hasta el mediodía, no sería tan raro decir que la gran mayoría de las clases de ALCE quizás se deberían organizar los miércoles por la tarde. Por supuesto, esto no es más que una mera conjetura que nosotras hacemos. Lo curioso es que esta incógnita se podría haber despejado sencillamente preguntándolo en una encuesta. ¿Por qué no nos han preguntado a los padres y madres qué día de la semana es el más conveniente para tener las clases dependiendo del lugar del Aula, en lugar de hacer una encuesta genérica de satisfacción?", inciden en la carta.

La comunidad española en los Países Bajos espera que sus demandas sean escuchadas y que se tomen acciones para asegurar la continuidad y calidad de la educación de sus hijos en el próximo curso.