Que Bruselas se moje de una vez

En una imagen tal vez poco afortunada, el presidente de Melilla, Imbroda, dijo que si las Fuerzas de Seguridad del Estado no podían hacer uso de los medios disuasorios, pondría azafatas en la frontera para dar la bienvenida a los inmigrantes. Pero esa declaración, sin duda exagerada, no deja de tener un fondo de verdad porque el problema -y lo llevamos viendo muchos años, los suficientes como para haber aprendido- no tiene una solución a corto plazo y menos aún si Bruselas no sólo se empeña en no admitir este asunto como suyo sino que además pide cuentas sobre las actuaciones a los países que son "su" frontera con África, la frontera de la propia Europa. Me parece de una hipocresía fuera de lo normal cuando Francia ha tomado decisiones drásticas y muy discutibles sobre el tema, Suiza decide lo que decide y hay un movimiento generalizado y peligrosísimo en toda Europa de partidos xenófobos.

22 feb 2014 - 19:58