El mercadillo local regresó a l municipio de Trasmiras durante la jornada de ayer. Después que Xinzo de Limia, la capitalidad comarcal, recuperase el evento el pasado jueves entre medidas importantes de seguridad para frenar el coronavirus, este domingo fue el turno para la localidad que, después de dos meses, pudo al fin celebrar una feria.
El buen tiempo acompañó a la celebración del mercadillo, que se limitó a la venta de productos locales, del campo y de la huerta. Pese a que a primera hora no fue mucha la afluencia de gente, las compras se fueron animando a medida que avanzó el día. Tal y como afirmaron algunos asistentes, los vendedores se fueron "bastante contentos". En total se instalaron en Trasmiras unos siete puestos -el 25 por ciento de los que suele haber en circunstancias normales-, cuyos responsables tuvieron que cumplir con la normativa impuesta por el Concello: una distancia mínima de seis metros entre ellos -preferiblemente ubicándose unos frente a otros- y el uso de medidas de protección.
En Trasmiras, tanto los vendedores como los asistentes acudieron al evento con mascarillas y guantes para garantizar la máxima seguridad en las ventas. Los compradores respetaron las filas.n
