El Bande se lleva el derbi por insistencia

Se impuso la lógica en O Outeiro. Dos polos opuestos en la clasificación se vieron las caras con objetivos diferentes. Y el Bande, que lucha por la zona noble, superó con claridad a un Ribeiro que vuelve a ser colista. Hubo que esperar hasta la segunda mitad para que los banduenses recuperaran la efectividad y sentenciaran el partido con un 3-0 contundente.

Y eso que los locales comenzaron mandando. La primera ocasión no se hizo esperar, pero Karim lanzó alto. El extremo banduense fue el mejor jugador sobre el césped. El guión era evidente. El Bande dominaba y llegaba, mientras que el Ribeiro buscaba no dejar espacios y salir a la contra con balones directos a la espalda de la defensa. Le salió bien durante el primer tiempo. La velocidad de Ismael y el saber hacer de Bruno Villar, que no aprovechó un mano a mano, metieron el miedo en el cuerpo a la parroquia local. Sin alardes, pero con claridad.

Rafita probó a Juan y Lamelas se encontró con el larguero en la réplica banduense, pero el marcador no se movió.

Apareció la efectividad

Parecía que el Bande estaba cocinando a fuego lento el triunfo. Y quedó confirmado nada más reanudarse el partido. Karim se asocia con Pablo y bate al meta amarillo con un disparo raso y cruzado. La lata estaba abierta.

A pesar del golpe recibido, no renunció el Ribeiro a dar la sorpresa. Pero cada vez les costaba más que el envío directo llegase a buen puerto.

El Bande apretó el acelerador. La banda derecha fue su mejor aliada. Pelota para Karim y el "7" blanquivioleta fue derribado en el área por Bruno. Penalti. Toño no dudó y consiguió el segundo gol para los locales.

Fue la condena para un Ribeiro que no pudo más. El carrusel de cambios hizo que el partido entrase en una fase de mayor tranquilidad, pero con la sensación de que el tercer tanto podía llegar en cualquier momento. El delantero David Soares no tuvo su tarde en el remate y la madera se volvió a cruzar en el camino de los de Iván González. Finalmente, en el último suspiro y tras un saque de esquina, Lamelas entró con todo para conseguir el gol que llevaba rozando toda la tarde a balón parado. Punto y final en el derbi. Ya no pasó mucho más.

O Outeiro vio como el equipo que estaba arriba sigue llamando a la puerta de los puestos de ascenso, y el conjunto de la parte baja no puede escapar del peligro. La insistencia y la calidad en la definición marcaron un derbi desigual.