Pabellón y Ourense CF, la armada provincial en la División de honor, cumplen las primeras semanas de pretemporada con sensaciones muy positivas
La armada provincial que desde septiembre defenderá el fútbol base ourensano en la elite juvenil nacional está de lleno en los preparativos de un curso exigente. Trece temporadas después dos conjuntos ourensanos participarán al mismo tiempo en la División de honor. En aquel lejano curso 2002-2003 habían sido Pabellón y CD Ourense, y en este momento repetirá el conjunto pabellonista y debutará el Ourense CF, un equipo que hace tres temporadas jugaba en las competiciones provinciales.
Precisamente los pontinos fueron los primeros en iniciar el trabajo. Regresaron al tajo el viernes 24 de julio. Mucha tarea tienen por delante pues solo continúan siete de los jugadores que hace apenas tres meses lograron el histórico salto de categoría. Barbadás, Allariz, Pabellón, Barco o Xinzo son algunos de los lugares en los que pescó el equipo que entrenará Fran Justo, otro debutante. El grupo de jugadores que está manejando en este momento es de 31 y "en diez días esa cifra debe quedarse en los 22 con los que vamos a afrontar el reto".
Justo se manifiesta "bastante contento hasta el momento, con los pies en el suelo pero incluso mejor de lo esperado. La disposición de los chavales es excelente y estamos trabajando mucho y bien".
Con todo ello, la criba no será sencilla: "Los jugadores me están sorprendiendo, incluso varios juveniles llegados desde Provincial están demostrando tener un nivel muy bueno. Las sensaciones son buenas pero ahora lo que hay que hacer es acertar con la selección del grupo de futbolistas con el que vamos a jugar", añade el entrenador Fran Justo.
En el Pabellón las novedades en lo que a la plantilla se refiere son muchas menos. Guillermo García y el cuadro técnico que completan Carlos Figueiredo y José Dopazo trabaja prácticamente con el mismo grupo de jugadores que tendrá durante el curso 2015-2016. Los únicos fichajes son los del mediocentro Joaquín y el central Rivas, ambos procedentes del Lalín.
El técnico Guillermo García reconoce que "a estas alturas lo único que quieres es que no haya sobresaltos, y a grandes rasgos no los está habiendo, quieres que todo vaya según lo planificado y así es".
Los demás nuevos, del B
Las otras caras 'nuevas' son las de jugadores que estaban en el filial de Liga Nacional, jugadores de sobra conocidos para un equipo técnico que tiene un filón en la sensacional estructura de cantera del referente de la base provincial. "Es una promoción que conocemos muy bien, no habrá ningún problema", asegura un Guillermo García para el que las sensaciones también son provechosas: "El equipo me transmite muy buenas sensaciones pero es cierto que nunca sabes lo que te vas a encontrar en la categoría. El Oviedo, por ejemplo, nos llevó a Martín Torres, fichó a dos mejicanos..., no sabes cuál será el nivel de la categoría pero estoy contento".
