Los ourensanos salvaron un punto en el tiempo de descuento gracias a un gol de Adil
El Barco logró un empate a tres goles en el tiempo de descuento gracias al gol materializado por el centrocampista marroquí Adil, en un partido que se le había puesto muy cuesta arriba desde el inicio, cuando los de Javi Rey perdían por 0-2.
Y es que el partido no pudo comenzar peor para los intereses de los de valdeorras. Sabían los jugadores de Javi Rey de la dificultad que entrañaba el partido ante un Boiro que llegaba a Calabagueiros como líder de la categoría y con un arsenal de jugadores, muchos de ellos de superior categoría. Y lo desmostraron desde el incio. Un equipo bien plantado y que daba sensación de peligro en cada ataque. Así llegó el primer gol visitante a los diez minutos, cuando el delantero Herbert superó a Macía con un tiro a media altura. El Barco se repuso del golpe, e intento coger el mando del partido y acercarse con peligro a la meta visitante. Aunque el Boiro asestó un nuevo golpe, justo antes del descanso, cuando de nuevo Herbert, con la derecha, volvía superar a Macía. Llegó el descanso y el Barco encaró la segunda parte con rabia. A los dos minutos de la continución, una pelota que peleó Mitogo, acabó en penalti cometido por Sidibé sobre el ariete local. Javi Recamán no perdonó y acortó distancias.
Final de infarto
Con el 1-2 se llegó al tramo final. En el 84, Borja lograba el tanto del empate, con un buen remate de cabeza, que hacía justicia y ponía el empate en el marcador. Pero aún quedaba mucha emoción. En el minuto 90, llegó otro mazazo cuando Sidibé de cabeza marcaba el 2-3 y enmudecía Calabagueiros.
Pero la fe mueve montañas y el Barco no arrojó nunca la toalla. Y tuvo su premio, vaya si lo tuvo. Una contra conducida con velocidad por Rodri Alonso la finalizó Adil, que seguía la jugada, para poner el 3-3 definitivo y llevando el delirio a las gradas y salvando un punto para su equipo, ante la desesperación de los jugadores del Boiro.
