El Campus Ourense se impuso en el derbi ante el CRAT de A Coruña pero terminó con dos jugadores que podrían decir adiós a lo que queda de liga
La División de Honor B volvió el pasado fin de semana al Estadio Universitario con una importante victoria del Campus Ourense frente al CRAT de A Coruña, en un intenso derbi, que a pesar de lo trabado de la mayoría de las acciones tuvo momentos de rugby de nivel.
Una victoria, que más allá de los cuatro puntos, tremendamente beneficiosos para los intereses del equipo de David Monreal, que se asienta en la zona noble de la tabla con un partido menos, tuvo un peaje en forma de lesiones que compromete las alineaciones de las próximas jornadas.
La baja más importante es la del ala, Fernando Gil. A los diez minutos de entrar en el campo, en el minuto 60 de juego, Fer intentó ensayar pero en el lance del juego sufrió una fractura de cúbito y radio, con afectación además del ligamento de la muñeca. El jugador fue operado el sábado y ya se encuentra en su casa a la espera de iniciar la recuperación de cara a la próxima campaña.
También tuvo que ser sustituido en el descanso del partido Carlos Morgade. El jugador ourensano sufrió la luxación de su hombro derecho, lo que le impidió continuar jugando. El alcance de la lesión está todavía por determinar y el periodo de espera para la reaparición dependerá de la evolución durante los próximos días. Lo que sí está confirmada es su ausencia para la próxima jornada.
Menos importante, es el contratiempo sufrido por el neozelandés Connor MacLeod, que sufrió un pisotón durante una acción del juego, lo que le provocó una fuerte inflamación en el pie que le obligó a pasar por un centro médico para realizarse una radiografía. Si bien el diagnóstico descarta alguna fractura, su presencia en Eibar también se antoja complicada.
Además, Óscar Santórum continúa con el proceso de recuperación de su lesión en la rodilla, mientras que Abraham, baja de última hora en el encuentro frente a los coruñeses, sigue con problemas físicos por una molesta piedra en el riñón, que le ha impedido entrenar con normalidad desde antes de Navidad.
David Monreal, técnico del club, destaca que "la verdad es que la victoria nos salió bastante cara. Tenemos un equipo corto de por sí, y todo lo que nos pasó esta semana nos trastoca. Solo espero que estos días no se lesione nadie más. Esta jornada llevaremos a varios jugadores del conjunto B al País Vasco", zanja.
