El argentino Diego Pablo Simeone explicó su idea para el Atlético de Madrid, un equipo 'equilibrado', con 'esfuerzo' y que no sólo juegue cuando tenga la pelota, y destacó que le 'interesa mucho que se entienda la palabra equipo'.
'Ser un equipo'. Ése es el objetivo del técnico en sus primeros pasos en el banquillo rojiblanco y así lo transmitió en rueda de prensa en la Ciudad deportiva de Majadahonda, después de seis días de entrenamientos y con la mirada en la primera prueba, el próximo sábado en Liga contra el Málaga en La Rosaleda.
'Estamos trabajando. Tenemos una idea. Podemos jugar 4-3-3, 4-2-3-1, 4-3-1-2... Siempre con cuatro en defensa, seguro, y viendo en consecuencia cómo están (los jugadores). Me gustaría verlos un poco más para poder ir definiendo cuáles son los nombres, pero lo que sí me pone contento es la gran predisposición que veo', relató.
'Me gusta el esfuerzo, ser un equipo equilibrado, no sólo jugar cuando tenemos la pelota, y me interesa mucho que se entienda la palabra equipo. A partir de ahí, todos jugamos bien. No me interesa que uno haga 25 goles y el equipo sufra. Y tampoco que el equipo reciba muchos y ofensivamente juegue muy lindo', advirtió.
'Eso no creo que sea un equipo. Apuntaremos a ser un equipo. Para ello necesitaríamos un tiempo que no lo hay. Por eso estamos tratando de ayudarnos con los jugadores que en este caso son más importantes', añadió Simeone, que compareció en rueda de prensa ante una veintena de medios de comunicación y una gran expectación.
Y admitió que 'uno va pensando y se ilusiona con el esfuerzo y la calidad técnica que tiene cada uno de ellos, como Arda, Diego, Pizzi, Salvio, Falcao, Koke... A ver de qué manera pueden jugar juntos. No dependerá de mí, si no de ellos. Si están dispuestos a hacer un gran esfuerzo en pos del equipo habremos dado un gran paso', dijo.
La visita a la Rosaleda será el primer desafío del año. Hasta allí llegará el Atlético con una racha alarmante a domicilio, un punto de 21 posibles en este curso de Liga. 'Los números están para romperse, no serán eternos', avisó Simeone, que siente 'una gran responsabilidad' en el banquillo del equipo madrileño, del que como futbolista fue uno de los ídolos de los aficionados a mediados de los 90, en su primera etapa, con títulos de Liga y Copa del Rey en la 1995-96, y en su segundo paso por el club, en la 2003-04.
'Estamos trabajando. Tenemos una idea. Podemos jugar 4-3-3, 4-2-3-1, 4-3-1-2... Siempre con cuatro en defensa, seguro, y viendo en consecuencia cómo están (los jugadores). Me gustaría verlos un poco más para poder ir definiendo cuáles son los nombres, pero lo que sí me pone contento es la gran predisposición que veo', relató.
'Me gusta el esfuerzo, ser un equipo equilibrado, no sólo jugar cuando tenemos la pelota, y me interesa mucho que se entienda la palabra equipo. A partir de ahí, todos jugamos bien. No me interesa que uno haga 25 goles y el equipo sufra. Y tampoco que el equipo reciba muchos y ofensivamente juegue muy lindo', advirtió.
'Eso no creo que sea un equipo. Apuntaremos a ser un equipo. Para ello necesitaríamos un tiempo que no lo hay. Por eso estamos tratando de ayudarnos con los jugadores que en este caso son más importantes', añadió Simeone, que compareció en rueda de prensa ante una veintena de medios de comunicación y una gran expectación.
Y admitió que 'uno va pensando y se ilusiona con el esfuerzo y la calidad técnica que tiene cada uno de ellos, como Arda, Diego, Pizzi, Salvio, Falcao, Koke... A ver de qué manera pueden jugar juntos. No dependerá de mí, si no de ellos. Si están dispuestos a hacer un gran esfuerzo en pos del equipo habremos dado un gran paso', dijo.
La visita a la Rosaleda será el primer desafío del año. Hasta allí llegará el Atlético con una racha alarmante a domicilio, un punto de 21 posibles en este curso de Liga. 'Los números están para romperse, no serán eternos', avisó Simeone, que siente 'una gran responsabilidad' en el banquillo del equipo madrileño, del que como futbolista fue uno de los ídolos de los aficionados a mediados de los 90, en su primera etapa, con títulos de Liga y Copa del Rey en la 1995-96, y en su segundo paso por el club, en la 2003-04.
