Sebastian Vettel (Red Bull) dominó con claridad el GP de la India, en el que Fernando Alonso (Ferrari) quedó segundo después de realizar una espectacular carrera en la que partía quinto.
El alemán dominó la prueba de principio a fin y consiguió así su cuarto triunfo consecutivo, con el que amplía a 13 puntos su ventaja en el Mundial sobre el asturiano a falta de sólo tres citas (Abu Dabi, Estados Unidos y Brasil) para que finalice el campeonato. Completó el podio Mark Webber (Red Bull) y después se situaron los dos pilotos de McLaren, Hamilton, cuarto, y Button, que fue quinto.
Fernando Alonso, consciente de la necesidad de pegar fuerte desde el principio para no perder el hilo de Vettel en la pelea por el título, intentó adelantar a los dos pilotos ingleses en la salida, aunque finalmente sólo lo consiguió con Hamilton. Se salvó Button en esta primera embestida, pero la alegría le duró poco al británico pues el ovetense volvió a atacar en la quinta vuelta y en esa segunda ocasión su maniobra sí fue exitosa.
A partir de ahí, el español comenzó una lenta y paciente caza a Webber, único obstáculo hacia un Vettel que aumentaba su ventaja a razón de medio segundo por vuelta. Logró su objetivo en el último tramo gracias a un brillante adelantamiento, que le dejó no obstante a 13 vueltas del final con pocas posibilidades de plantarle cara a Vettel, que contaba con un insalvable colchón de 12 segundos.
Con el triunfo, el alemán confirmó su ascenso meteórico de las últimas jornadas, aunque Alonso evitó una sangría mayor gracias a una espectacular remontada que lo mantiene pese a tener un coche menos competitivo como un serio candidato a la corona.
Tras la igualdad inicial de un campeonato que comenzó con siete ganadores distintos en el mismo número de carreras y en el que Alonso ostentó el liderato ocho citas seguidas en el tramo intermedio, el germano ha impuesto ahora la dictadura que le condujo a ganar los dos últimos Mundiales.
Felipe Massa, compañero de Alonso en Ferrari, acabó sexto en la India, sin alterar la posición desde la que partió en parrilla, igual que Raikkonen (Lotus), que salía tras él y finalizó séptimo. En el año de su regreso a la Fórmula 1 tras probar suerte en los rallys, el finlandés es junto a Webber el único piloto que fuera de la dupla dominadora aún conserva posibilidades matemáticas, aunque muy pocas, de conquistar el campeonato.
MAL DÍA PARA DE LA ROSA
Asimismo, Pedro de la Rosa (HRT) tuvo que abandonar prematuramente la carrera a causa de un fallo en los frenos. También abandonaron por sendos pinchazos Sergio Pérez (Sauber) y Schumacher (Mercedes).
Más allá de la competición, el circuito de Buddh registró un buen ambiente en su segundo año en competición, aunque lejos del lleno que obtuvo en su estreno.
Fernando Alonso, consciente de la necesidad de pegar fuerte desde el principio para no perder el hilo de Vettel en la pelea por el título, intentó adelantar a los dos pilotos ingleses en la salida, aunque finalmente sólo lo consiguió con Hamilton. Se salvó Button en esta primera embestida, pero la alegría le duró poco al británico pues el ovetense volvió a atacar en la quinta vuelta y en esa segunda ocasión su maniobra sí fue exitosa.
A partir de ahí, el español comenzó una lenta y paciente caza a Webber, único obstáculo hacia un Vettel que aumentaba su ventaja a razón de medio segundo por vuelta. Logró su objetivo en el último tramo gracias a un brillante adelantamiento, que le dejó no obstante a 13 vueltas del final con pocas posibilidades de plantarle cara a Vettel, que contaba con un insalvable colchón de 12 segundos.
Con el triunfo, el alemán confirmó su ascenso meteórico de las últimas jornadas, aunque Alonso evitó una sangría mayor gracias a una espectacular remontada que lo mantiene pese a tener un coche menos competitivo como un serio candidato a la corona.
Tras la igualdad inicial de un campeonato que comenzó con siete ganadores distintos en el mismo número de carreras y en el que Alonso ostentó el liderato ocho citas seguidas en el tramo intermedio, el germano ha impuesto ahora la dictadura que le condujo a ganar los dos últimos Mundiales.
Felipe Massa, compañero de Alonso en Ferrari, acabó sexto en la India, sin alterar la posición desde la que partió en parrilla, igual que Raikkonen (Lotus), que salía tras él y finalizó séptimo. En el año de su regreso a la Fórmula 1 tras probar suerte en los rallys, el finlandés es junto a Webber el único piloto que fuera de la dupla dominadora aún conserva posibilidades matemáticas, aunque muy pocas, de conquistar el campeonato.
MAL DÍA PARA DE LA ROSA
Asimismo, Pedro de la Rosa (HRT) tuvo que abandonar prematuramente la carrera a causa de un fallo en los frenos. También abandonaron por sendos pinchazos Sergio Pérez (Sauber) y Schumacher (Mercedes).
Más allá de la competición, el circuito de Buddh registró un buen ambiente en su segundo año en competición, aunque lejos del lleno que obtuvo en su estreno.
