El conjunto azulgrana preparó la final en Saint Albans, como hiciera en el 92 cuando se enfrentó a la Sampdoria

El Barcelona repite ritual

Los jugadores del Barcelona, en el momento de partir hacia Londres.? (Foto: albert olivé)
Desde la elección de la sede de entrenamientos en Saint Albans, como en 1992, a la presencia ante los medios de Puyol y Víctor Valdés, el Barcelona parece dispuesto a repetir una serie de actuaciones encaminadas a llamar a la buena suerte para que le ayuden a llevarse el título el sábado en la final de la Liga de Campeones.
Como en 1992, cuando conquistó su primera Copa de Europa, el Barcelona repite ritual y volvió a entrenar en Saint Albans, donde completó la última sesión en la Ciudad deportiva del Arsenal antes de pisar este viernes el césped de Wembley.

Hace 19 años, el Barcelona ya se instaló en Saint Albans para preparar el encuentro ante la Sampdoria, y ahora, dos décadas después, cuando tuvo que adelantar el viaje a causa de las dudas generadas por la actividad del volcán islandés Grimsvotn, una de las muchas gestiones fue buscar un espacio para entrenar durante dos días.

Casualidad o no, en Saint Albans había un hueco, en los mismos campos en los que entrena desde hace unos cuantos años el deseado Cesc Fàbregas.

Pero se podrían producir más coincidencias. En la última rueda de prensa de Guardiola en Barcelona justo antes de viajar a Roma para disputar la final de la Liga de Campeones de 2009, el técnico azulgrana lució un polo de color amarillo, justo del mismo tono que el del pasado lunes durante la multitudinaria comparecencia ante los medios de comunicación.

Casualidad o no, en las dos últimas finales de la Liga de Campeones que el Barcelona ha jugado (en París 2006 y en Roma 2009) y ha ganado, dos jugadores se han encargado de ofrecer la rueda prensa de la final.

Este viernes, en la sala de prensa del nuevo estadio de Wembley, Puyol y Víctor Valdés acompañarán a Pep Guardiola en la comparecencia ante los medios. 'Si funciona no lo toques'. Es lo que deben pensar en el Barcelona. Porque no es cuestión de romper la serie que se inicio en Londres y continuó en París y en Roma.

Antes, después de padecer en carne propia el atasco en las carreteras de Londres, los jugadores del Barcelona llegaron al hotel del barrio de Chelsea a bordo de su autobús azulgrana.

Te puede interesar