Las redes sociales, siempre protagonistas, llevaron el calor hasta Angrois en un día de homenajes y sentidos recuerdos
Hace un año y un día, a las 20:40, Galicia cambió el Estar por el Ser. No estábamos en A Grandeira, pero éramos parte del manto de solidaridad tejido,también, en los talleres de las redes sociales durante aquella noche aciaga. La efeméride de la tragedia del Alvia ha sido como quien se para en el camino para echar la vista atrás y soltar un suspiro de doce meses. Porque entonces, hace justo ahora un año, Marta Besada pedía auxilio en Twiter para localizar a su hermana, Carolina, fallecida en el siniestro. Este año, escribió: "Ahora mismo, hace un año, no somos conscientes de cómo te puede cambiar la vida".
Los homenajes escritos de los amigos de la joven ourensana muerta se sucedieron, atesorando en pequeñas frases los grandes momentos. Bruno Platero, que conocía bien a Carolina, colgaba esta frase en su cuenta de Instagram:"Aprendí que ser mejor es mejor que nada, y que el cielo no está lejos con tus alas". Para cuando la noche derrota al día, siempre Rosalía: "Se cantas, es ti que cantas. Se choras, es ti que choras", rezaba un tuit de Jaime Vázquez, citando la Negra Sombra (que sempre nos asombra).
Susana Garrido,madre de la fallecida, escribió una carta para evocar el recuerdo de su hija."Mi dulce niña Carolina", y no se conformó con un título que podría haber sido en realidad un microrrelato, sino que resumió el dolor que camina a través del calendario: "Es absurdo manejar el tiempo", decía.
A partir del 24 de julio, ya no pudimos dejar de pensar al leer "Alvia" en los lomos de un tren. En A Grandeira, hoy el Alvia circula a 20 y 30 por hora, 366 días después de que, al contrario que la memoria, todo fallara para traer la locura.
