ENTREVISTA

Fernando Suanzes: “La lentitud de la justicia a veces se magnifica, en Italia o Francia es peor"

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photo_camera Fernando Suanzes, en su despacho en el TSXG.

El fiscal superior de Galicia, le apasionaba el deporte, especialmente la natación, pero "por azar" su gran carrera es la judicial.

A Fernando Suanzes (Ferrol, 1953) le apasionaba el deporte, especialmente la natación, pero "por azar" su gran carrera es la judicial.Está "encantado" de ser el fiscal superior de Galicia.  

¿Cuando jugaban de pequeños a policías y ladrones, se pedía ser fiscal?
De verdad que no recuerdo haber jugado a policías y ladrones. Jugábamos a otras cosas, a las canicas, al peón... En cualquier caso, quiero decirle que si fuese hoy niño mi juego ideal sería el de periodistas y tertulianos. He oído a chavales decir "yo de mayor quiero ser tertuliano y a ser posible de deportes". Politólogo también se lleva mucho. 

En el colegio estaba mal visto el acusica...
Efectivamente, tiene usted toda la razón. Es tradicional en España. Desde un punto de vista popular el acusica está mal visto. A mí me asombra cuando viajo a países como Alemania o Inglaterra y ves que nadie aparca en doble fila. Preguntas y te dicen que no se les ocurre porque el vecino inmediatamente llama a la policía para que pongan una multa. Al margen de esa consideración popular, yo le quiero decir que la Fiscalía no está relacionada a nada parecido al acusica. Es un órgano constitucional, forma parte de la estructura del Estado desde la segunda mitad en España del siglo XIX y además de la función de promover la acción de la justicia, incluso en algunos casos solicitando la absolución, últimamente hay un fenómeno expansivo que nos atribuye funciones sociales como proteger a menores, discapacitados, mujeres maltratadas. Algún tratadista ha dicho nada menos que el Ministerio Fiscal hoy en España es el custodio de la legalidad democrática. Casi nada. Y además ha de ser el defensor de los derechos de los ciudadanos. 

¿Qué le motivó a ser fiscal?
En el célebre discurso de Steve Jobs en la Universidad de Stanford decía que la vida de la gente son sucesos que se van uniendo y de repente te llevan inexorablemente a algún lugar que ya transitas y no puedes salir. Otros le llaman divina providencia, azar, destino... Creo que hay algo de esto. De niño no pensé  jamás en dedicarme al Derecho, pero por alguna razón te vas encaminando hacia ese mundo y ser fiscal me encanta y es una de las profesiones más bonitas que puedo vislumbrar. 

¿Le hacen más la pelota desde que es fiscal superior?
Pues no lo he detectado.

Ha sido nadador y deportista. ¿Hubo codazos con los otros competidores por el puesto?
No tuve ningún problema de codazos con los tres que se presentaron, que por cierto son fiscales excelentes.  

Habló del fiscal como custodio de la democracia, ¿cree que la sociedad lo aprecia así?
Creo que una de las cosas que hacemos mal los españoles es la comunicación. No sabemos valorarnos ni transmitir a los demás lo que hacemos realmente. Afecta a todas las profesiones. Ahora de fiscal superior me encuentro con gente extraordinariamente valiosa. Son profesionales que cuesta mucho formar y que tienen una calidad muy alta. Eso no sabemos transmitirlo bien. Entiendo que la sociedad tiene una valoración buena de los fiscales, pero no sabe las funciones de naturaleza social  ni el trabajo polivalente que hacemos. Ojalá podamos transmitirlo bien en el futuro. 

En Galicia hay 146 fiscales titulares, ¿son suficientes?
Contando los sustitutos somos 172. Si tenemos en cuenta que somos 2,7 millones de ciudadanos, por cada 100.000 habitantes nos sale a algo más de seis fiscales. Es poco. Si ves los Presupuestos Generales del Estado para 2016 la Administración de Justicia aún no llega al 1% del PIB. En otros países europeos está en el dos o en el dos y medio. Es  mucha diferencia. Tenemos el problema añadido que de ese volumen, casi el 80% es para pagar a los trabajadores. En Europa está equilibrado entre personal y mecanismos tecnológicos. Ojalá algún día se haga un pacto de Estado y haya un plan definido para un número determinado de años con sus fondos. El número de fiscales no es suficiente en mi opinión, como el de jueces, aunque tengo que reconocer que la partida en los Presupuestos Generales del Estado se ha incrementado sobre un 7% y también la Xunta ha incrementado considerablemente los medios materiales, pero estamos en un punto histórico en el que hay que ser más ambicioso. 

Con la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal desde este sábado tienen que fijar un plazo de seis meses para las causas normales y de 18 para las complejas.
Los 172 fiscales vamos a tener que revisar alrededor de 35.000 asuntos. Eso nos lleva a una situación de dificultad extrema que en algunos casos se asemeja a una imposibilidad absoluta. Pero repito y lo digo de verdad, la carrera fiscal tiene el compromiso, la profesionalidad, el trabajo y la dedicación para intentar que todo eso se desarrolle de la mejor manera posible. Tenemos seis meses para revisar y poner el contador a cero de todas las causas. Se puede hacer con una forma propia de otros tiempos o de mecanismos tecnológicos. Pero todavía no tenemos en España, no sólo en Galicia, una interacción suficiente de manera que a través de una aplicación informática se pueda saber con exactitud todos los asuntos que tiene el juez y la situación en la que se encuentran. 

Hay descontento porque llevarán el control del tiempo pero no el de la instrucción. ¿Por qué?
Se observa algo en otras legislaciones que tiene un interés y con buena voluntad se introduce aquí. Lo veo, y lo he repetido en ocasiones, como el que tiene un coche y le va poniendo un volante de un Mercedes, un amortiguador de un Audi... Si no se hace muy bien, lo que sale de ahí es un engendro. Lo que aquí ha ocurrido es propio de otras legislaciones e incluso de proyectos que hemos tenido en España, donde el que investiga es el fiscal. Así obviamente puedo controlar mis tiempos, pero no es así el sistema. La dirección y el control es del juez el instructor y al fiscal se le pide que lo controle. Pues intentaremos hacerlo en la mejor medida de lo posible, pero no será como en un sistema en el que el 

iscal investiga  y tiene la responsabilidad absoluta. Es el que en general queremos los fiscales. 

¿Que pase de imputado a investigado hace que uno pueda dormir más tranquilo?
Que le llamen a uno investigado o encausado a diferencia de imputado o acusado, pues quizá sea un avance gramatical, pero desde un punto de vista práctico no creo que tenga mucha variación. 

Dijo hace unos meses que la mejor manera de no llevar nada es abarcarlo todo. ¿Supongo que la jueza Pilar de Lara saltó del asiento o no iba dirigido a ella?
Nosotros hablamos en términos generales. Hemos de dejar tranquilos a la jueza y a los jueces instructores porque bastante trabajo tienen.  He dicho en alguna ocasión que hay que ayudarles. La gestión de asuntos tiene que ser a través de equipos. También hemos dicho que en ocasiones lo podría hacer mejor la Fiscalía. Dentro de las técnicas de gestión procesal, una es no tratar de abarcar todo lo posible. Eso es un error porque además luego conduce en la práctica a que hay una serie de acumulación de folios, piezas... En Europa no entienden que aquí haya tantísimos recursos. En un sistema en el que investiga el Ministerio Fiscal no tienen un volumen tan enorme de recursos.

¿Se ha excedido demasiado en el tiempo Pilar de Lara con la ‘Pokemon'?
Es un procedimiento ubicado en la ciudad de Lugo, con un seguimiento especial por parte de la Fiscalía de Lugo, y que vamos a tratar de colaborar con el apoyo de la Fiscalía Superior y de todas las de Galicia para que se agilice y se simplifique de la mejor manera posible. Yo en actuaciones particulares de juezas o jueces si me permite no entro. Creo que podemos avanzar para hacer que eso funcione de una forma más eficaz y rápida. 

El exalcalde de Ourense Francisco Rodríguez lleva desde septiembre de 2012 en libertad bajo fianza de 6.000 euros. ¿No es una incertidumbre demasiado larga?
La verdad es que sí. Tenemos un problema de lentitud que a veces se magnifica porque países como Italia o Francia aun tardan más que nosotros. En cualquier caso es un problema importante y en ese caso que me pone, como en cualquier otro, la lógica elemental conduce a que no se pueden tener instrucciones que perduran en el tiempo ni se pueden tomar medidas que afectan a derechos fundamentales durante un tiempo elevado, como declarar secretos de sumario durante un tiempo excesivo de manera que el ciudadano no llegue a saber bien  de lo que tiene que defenderse. 

Durante la presentación de la Memoria Anual de la Fiscalía se mostró preocupado por el aumento de los casos de corrupción, ¿somos así o hay demandas injustificadas?
Aparte de lo que le voy a decir, sospecho que en todos los países hay un margen de corrupción. Estamos inmersos en el proceso beneficioso de conocer exactamente cuáles son nuestros márgenes. La corrupción afecta a la credibilidad del sistema y de las instituciones y por eso es una prioridad para la Fiscalía. Aunque los casos de corrupción sólo representan un 0,20% de los asuntos incoados, sí son una parte importante. He hablado de catarsis y creo que de aquí saldrá algo bueno. Ya todo el mundo sabe que no todo vale y que este tipo de delincuencia se detecta y se castiga. Soy optimista  en la medida que entiendo que vamos a progresar mucho, pero no por el ejercicio de las acciones penales, sino por la sociedad en general como algo que ha interiorizado. 

¿Cree que también se ha incrementado el descrédito en la Justicia por situaciones como la de Bárcenas, Rato...?
El lunes pasado en unos debates jurídicos en Madrid le escuché a un procesalista de reconocida competencia decir que, para él, el siglo XIX fue el de las asambleas legislativas; el XX el de los ejecutivos y gobiernos y se preguntaba si el siglo XXI, al menos en España, visto el descrédito que tienen los ciudadanos sobre el poder ejecutivo y el legislativo, si no sería el siglo del poder judicial. Él decía que sí. Yo no soy tan optimista, pero ojalá sea el siglo de la justicia. 

¿Actúan poco de oficio los fiscales?
No estamos en una administración de justicia justiciera. Hay que sujetarse al imperio de la ley. Usted no pude levantarse un día y creerse una mezcla de Superman, Batman y el Capitán Trueno y empezar a incoar diligencias simplemente por una noticia 'criminis' que puede salir publicada en los medios de comunicación o de... Hay que hacerlo con moderación y equilibrio y estudiando las cosas. Tal vez desde los juzgados de guardia o desde la propia Fiscalía se debieran incoar más asuntos de oficio... Puede ser, que hagamos una valoración, una autocrítica, pero en cualquier caso para que el sistema funcione mejor. 


La Fiscalía de Ourense acaba de archivar la denuncia de una mujer contra Manuel Baltar que lo acusaba de ofrecerle un puesto de trabajo a cambio de sexo. 
En el asunto del presidente de la Diputación de Ourense se produjo una denuncia, la Fiscalía de Ourense, personalmente el fiscal jefe, incoó unas diligencias de investigación penal y en mi opinión fueron llevadas de forma absolutamente diligente en el sentido de que no ha transcurrido tantísimo tiempo ni mucho menos para llegar a una conclusión. El fiscal, como siempre, hace una valoración jurídica, no política ni social ni de otra índole, y llegó a la conclusión de que es un archivo. Nosotros creemos que es acertada la resolución. En cualquier caso, el sistema español es tan garantista que permite a la señora acudir al juzgado para ver si hay otra opinión diferente o debe seguirse el procedimiento.

Pachi Vázquez, el exsecretario general del PSdeG, dice que no fue por casualidad que fuese  imputado por unas contrataciones de hace una decena de años en el Concello de O Carballiño justo cuando decidió competir para ser candidato a la alcaldía de Ourense.
Si yo pensara como Fernando Suanzes, y seguramente como usted y cualquier otro ciudadano, probablemente llegaríamos a una imaginación parecida a la de Pachi Vázquez, ahora desde mi posición como fiscal superior tengo que decir que es absolutamente imposible que un juez de instrucción o un fiscal se encuentre con un periodo en donde no haya elecciones. La posición humana de Pachi Vázquez la entiendo, pero desde un punto estrictamente organizativo y jurídico el ciudadano tiene que entender que resulta casi imposible que un asunto judicial relevante no se encuentre con algunos comicios.

¿Cree que la política se ha judicializado y les toca a ustedes resolver sus batallas?
Hemos dicho por activa y por pasiva que la Fiscalía no da lecciones de moralidad y ética a nadie. Nosotros estudiamos la parte jurídica, hoy mismo la prensa se hace eco del archivo de la denuncia al presidente de la Diputación de Ourense y el mismo fiscal jefe archiva un asunto del anterior alcalde sobre la utilización de fondos para unas aceras. Uno es del PP, el otro del PSOE, y nosotros hacemos nuestra valoración jurídica. 

Se habla de las presiones políticas. ¿Las ha recibido o tiene noticias de que las haya?
Tengo que decir, sinceramente, que nunca he recibido presiones del poder político ni las percibo. El político correría un riesgo cercano a la imprudencia absoluta porque la imparcialidad es total. Somos una institución con gente seria 

Pongamos que llama el ministro de Justicia. 
Al ministro no se le ocurriría ni por asomo  llamar ni al fiscal general del Estado por un  problema.

Las víctimas del Alvia se quejan de que el fiscal sólo haya acusado al maquinista. ¿Qué les diría?
Para nosotros es un tema sensible por las víctimas y hasta tenemos una unidad especializada de asistencia. A las víctimas tengo que decirles que comprendemos sus peticiones, pero la Fiscalía Superior respalda al fiscal y  el procedimiento penal está abierto. 

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