Se emplearán un total de 88 cámaras, de las cuales 20 están operativas, para controlar un 54% del territorio gallego .
La conselleira del Medio Rural, Ángeles Vázquez, ha visitado este martes el centro de coordinación central contra incendios de Galicia para supervisar el funcionamiento del nuevo sistema de vigilancia, constituido por un total de 88 cámaras que controlarán el 54 % del territorio gallego.
La ubicación de estos dispositivos no ha sido revelada porque el Gobierno gallego quiere evitar que se produzca cualquier tipo de sabotaje, pero sí ha incidido en que están colocadas preeminentemente en zonas de alta actividad incendiaria.
Actualmente, están operativas 20 cámaras del total de 88 que serán instaladas en los 44 puntos de control habilitados, que abarcarán una zona de extensión superior al millón y medio de hectáreas, de las que se dispondrá de imágenes de gran resolución en tiempo real.
Asimismo, las cámaras disponen de un zoom de gran alcance, capaz de –entre otras funciones- leer matrículas a grandes distancias; sensores de movimiento o captura de infrarrojos para situaciones de baja visibilidad.
La Xunta prevé que estos dispositivos de vigilancia cumplan una triple función, ya que en primer lugar servirán para supervisar el estado de las zonas controladas, pero también aportarán información relevante a los equipos de extinción en caso de incendio o recabarán pruebas para incriminar a los posibles incendiarios.
El almacenamiento de las imágenes tomadas se prolongará, de acuerdo con la normativa de protección de datos, durante un mes desde la filmación de las mismas.
El coste de este dispositivo, sufragado por la Consellería del Medio Rural y por la Agencia para la Modernización Tecnológica de Galicia (Amtega) supera los dos millones de euros y se prevé que pueda ser ampliado en futuras temporadas si su funcionamiento es el adecuado.
