El juzgado levanta el secreto de sumario de la última macroredada policial que se saldó con 80 imputados
Una de las mayores operaciones policiales contra el mercado vigués de A Pedra, dirigida por el Juzgado de Instrucción número 3, desarrollada el mes pasado, y que se saldó con 80 imputados, se inició a raíz de la denuncia de una firma textil, Lacoste, a la que se sumaron otras muchas, entre ellas Ralph Laurent o Tommy Hilfiger. Dicha denuncia, contra la propiedad intelectual, dio lugar a un operativo que se prolongó durante más de un año y en el que la Policía Nacional llevó a cabo una exhaustiva labor junto con la Agencia Tributaria y en colaboración con a Unidad Nacional de Informaçöes e Investigaçao Criminal de Portugal.
Tras el levantamiento del sumario, decretado por el juzgado, se ha podido conocer que la Policía realizó seguimientos y vigilancias a cerca de una decena de comerciantes del mercado de A Pedra así como a otro implicados en el país vecino, tras la sospecha de que allí se encontraban los proveedores de las mercancías supuestamente falsificadas.
Junto a esas vigilancias, los encargados de la investigación también realizaron escuchas telefónicas a al menos a cinco personas que están imputadas por presuntos delitos contra la propiedad industrial, contrabando, fraude fiscal y blanqueo de capitales.
En el operativo se intervinieron 20.000 artículos de vestir, 1.500 paquetes de tabaco de contrabando, un revólver y 24.000 euros en efectivo.
Aunque la investigación se centró en mercado vigués y algunos locales y almacenes del entorno, en Portugal se ejecutaron una docena de registros en los concellos de Guimaraes y Póvoa de Lanhoso, en los que se aprehendieron 2.204 artículos de vestir y calzado, con un valor cercano a los 27.000 euros, una escopeta, un bastón extensible y 5.900 euros en efectivo.
Simultáneamente al dispositivo desplegado los días 14 y 15 de octubre en los alrededores del centro del Casco Vello, en Portugal, se llevaba a cabo la inspección de ocho empresas de los concellos de Guimaraes y Barcelos, con material que estaba destinado al mercado español, concretamente a los vendedores de Vigo.
Sobre el valor de las prendas intervenidas en los 53 locales registrados en el Casco Vello, que se mantienen a día de hoy cerrados, todavía no se ha dado una cifra, si bien, por los cálculos de lo obtenido en Portugal, podría estar sobre los 350.000 euros.