Aunque reconocen que Feijóo también hizo contactos en su viaje por América Latina, los empresarios que estuvieron en alguna de las reuniones en los cuatro países creen que lo único que está maduro son los 7 remolcadores para Pemex
El presidente de la Xunta aterriza al mediodía de hoy en Santiago de Compostela. Durante estos siete días en los que visitó Uruguay, Argentina, Brasil y Colombia ha conseguido poner sordina al malestar por los recortes que acometió el Gobierno de Mariano Rajoy. Al Consello de la Xunta no le da tiempo a llegar, pero un presidente en campaña no puede permitirse que el personal piense que dedica una tarde a haraganear. Alberto Núñez Feijóo llega y se va al tajo, según reza en la agenda pública. A las 17 horas recibe al fundador y presidente honorario de ICEACSA, Javier Blanco Rodríguez-More, en San Caetano. Con la rueda de prensa después del encuentro apanda Javier Guerra, conselleiro de Economía e Industria, que lo acompañó en el viaje y, a no ser que haya prensa esperando al presidente en el aeropuerto, será él quien tenga que explicar los logros de una misión comercial que tanto PSOE como BNG calificaron de 'huida' en plena tormenta política y eonómica.
FOTOGRAFÍAS
Feijóo consiguió la fotografía con dos presidentes, el uruguayo José Mújica y el colombiano Juan Manuel Santos, y dos ministros de estos respectivos países. En Argentina se dedicó a visitar a los empresarios y a los emigrantes gallegos porque las relaciones con Cristina Kirchner están un poco mustias, y en Brasil no pasó del Gobernador de Sao Paulo, aunque esta ciudad es el motor económico de Brasil. Feijóo aquí pinchó. Tanto a los expresidentes Manuel Fraga como Emilio Pérez Touriño en Brasil los recibió el presidente del Gobierno. Con Cristina Kirchner ya se sabe que todo puede pesar.
Pero además de comer y hacerse fotos con la colectividad gallega, el presidente de la Xunta fue haciendo anuncios allá por donde pasaba a modo de titular. En Uruguay destacó que las tres barcazas que está construyendo el grupo gallego Galictio 'tienen que ser el inicio de un gran proyecto'. Antes, al presidente José Mújica le ofreció 'nuevas vías de intercambio en el naval y en las energías renovables'. Sorprendió que en la fotografía que envió la Xunta de una reunión de alto nivel no hubiese ni un solo papel en la mesa..
En Argentina el presidente gallego garantizó que las relaciones comerciales están blindadas, aunque lo dijo sin consultar con Cristina Kirchner. Y como en la quinta provincia no había mucho que rascar económicamente por el desencuentro entre los dos estados, Feijóo se dedicó a pasearse por el Centro de Galicia para interesarse por la emigración, que también vota. El PSOE no tiene constancia de que haya pedido el voto, según confesó la diputada Marisol Soneira, 'pero tampoco hace falta'
Ya en Brasil, en Río de Janeiro pesó más la agenda institucional con las visitas a la 'Sociedade de Recreio dos Ancianos para Asilo da Velhice Desamparada' y a la 'Sociedade Espanhola de Beneficiencia Hospital Español', y en Sao Paulo mandó la económica. La nota que envió el gabinete de prensa de la Xunta decía que 'Feijóo abre el diálogo con Repsol para participar en la provisión de buques de interés económico y de importancia estratégica de apoyo a las plataformas petrolíferas'. El titular, como la partitura, suena muy bien, pero uno de los 50 empresarios que estuvieron presentes en la reunión en la que también participó la empresa Adolfo Domínguez o Pescanova, afirma bajo el compromiso de mantener el anonimato que 'lo de Repsol está muy verde. Está bien que el presidente de la Xunta vaya a esos sitios, pero también somos conscientes de que hay cosas que lo dice por la época política en la que se encuentra. Lo único de todo esto que parece seguro son los siete remolcadores de Pemex, que propiciarán 1.500 trabajos un año y no 2.500 como dicen'.
En Bogotá, Feijóo anunció que se ha profundizado en las posibilidades de colaboración en materia de pesca, infraestructuras y el naval tras reunirse con el presidente Juan Manuel Santos. 'Relaciones con Colombia en cuanto a la pesca y el naval nunca hemos tenido. En infraestructuras sí hay alguna posibilidad y algo tiene que vender Feijóo ahora que se mete en campaña electoral', avisa alguien que estaba allí.
FOTOGRAFÍAS
Feijóo consiguió la fotografía con dos presidentes, el uruguayo José Mújica y el colombiano Juan Manuel Santos, y dos ministros de estos respectivos países. En Argentina se dedicó a visitar a los empresarios y a los emigrantes gallegos porque las relaciones con Cristina Kirchner están un poco mustias, y en Brasil no pasó del Gobernador de Sao Paulo, aunque esta ciudad es el motor económico de Brasil. Feijóo aquí pinchó. Tanto a los expresidentes Manuel Fraga como Emilio Pérez Touriño en Brasil los recibió el presidente del Gobierno. Con Cristina Kirchner ya se sabe que todo puede pesar.
Pero además de comer y hacerse fotos con la colectividad gallega, el presidente de la Xunta fue haciendo anuncios allá por donde pasaba a modo de titular. En Uruguay destacó que las tres barcazas que está construyendo el grupo gallego Galictio 'tienen que ser el inicio de un gran proyecto'. Antes, al presidente José Mújica le ofreció 'nuevas vías de intercambio en el naval y en las energías renovables'. Sorprendió que en la fotografía que envió la Xunta de una reunión de alto nivel no hubiese ni un solo papel en la mesa..
En Argentina el presidente gallego garantizó que las relaciones comerciales están blindadas, aunque lo dijo sin consultar con Cristina Kirchner. Y como en la quinta provincia no había mucho que rascar económicamente por el desencuentro entre los dos estados, Feijóo se dedicó a pasearse por el Centro de Galicia para interesarse por la emigración, que también vota. El PSOE no tiene constancia de que haya pedido el voto, según confesó la diputada Marisol Soneira, 'pero tampoco hace falta'
Ya en Brasil, en Río de Janeiro pesó más la agenda institucional con las visitas a la 'Sociedade de Recreio dos Ancianos para Asilo da Velhice Desamparada' y a la 'Sociedade Espanhola de Beneficiencia Hospital Español', y en Sao Paulo mandó la económica. La nota que envió el gabinete de prensa de la Xunta decía que 'Feijóo abre el diálogo con Repsol para participar en la provisión de buques de interés económico y de importancia estratégica de apoyo a las plataformas petrolíferas'. El titular, como la partitura, suena muy bien, pero uno de los 50 empresarios que estuvieron presentes en la reunión en la que también participó la empresa Adolfo Domínguez o Pescanova, afirma bajo el compromiso de mantener el anonimato que 'lo de Repsol está muy verde. Está bien que el presidente de la Xunta vaya a esos sitios, pero también somos conscientes de que hay cosas que lo dice por la época política en la que se encuentra. Lo único de todo esto que parece seguro son los siete remolcadores de Pemex, que propiciarán 1.500 trabajos un año y no 2.500 como dicen'.
En Bogotá, Feijóo anunció que se ha profundizado en las posibilidades de colaboración en materia de pesca, infraestructuras y el naval tras reunirse con el presidente Juan Manuel Santos. 'Relaciones con Colombia en cuanto a la pesca y el naval nunca hemos tenido. En infraestructuras sí hay alguna posibilidad y algo tiene que vender Feijóo ahora que se mete en campaña electoral', avisa alguien que estaba allí.
