La empresa pública Tragsa comenzó a recoger basura acumulada en las calles de Lugo con motivo de la huelga indefinida de los trabajadores del servicio en puntos de alerta sanitaria "con un considerable despliegue de medios". Así, desde ayer y hasta que se resuelva el conflicto entre los trabajadores y Urbaser, concesionaria de la limpieza en Lugo, y la dirección, Tragsa se hará cargo de la recogida de desperdicios en los más de cien puntos donde se ha decretado alerta sanitaria tras quince días de huelga.
El concejal de Medio Ambiente de Lugo, Luís Álvarez, secundado por el alcalde, José López Orozco, señaló que el despliegue será "superior" al que desdobla Urbaser "cada día". Así, concretó que Tragsa "trabajará con seis camiones compactadores para la recogida de basura, tres de carga lateral y tres de carga trasera, dos camiones de cajas abiertas con excavadoras suficientes y, además, el personal suficiente que tiene autorizada la contratación desde sus servicios jurídicos de Madrid porque hay que hacer una recogida manual de bolsas fuera de los contenedores".
Por su parte, el secretario del comité de Urbaser, Julio Pacios, informó de que se acumulan unas 700 toneladas de residuos en las calles y en la zona rural de la capital lucense, tras dos semanas de huelga por parte de la plantilla, de 139 empleados.
