Cuando desde aquí apuntábamos que sus apretadas agendas eran el único punto en contra del matrimonio Bloom-Kerr parece que no nos equivocábamos. Y es que desde que su calendario laboral se ha relajado un poco la pareja empieza a mostrarse en público, y lo hacen mostrando lo felices que son.
Si la vez pasada la pareja era sorprendida en actitud cariñosa cuando el actor se presentaba a buscar a la modelo a un salón de belleza, o saliendo de casa de unos amigos, en esta han sido ellos los que se han plantado ante las cámaras. Nada más y nada menos que en la 70 Edición de los Globos de Oro, celebrada en Beverly Hills.
Miranda, que durante la gala lució un vestido fucsia, posó junto a Orlando con un impresionante vestido color burdeos, con escote en V, gran lazada en la cadera y una abertura en la pierna. Por su parte Bloom vistió un traje azul, sin corbata, ya que se trataba de la after party promocionada por InStyle-Warner Bros.
Muy felices durante toda la fiesta Orlando no pudo - ni casi ningún asistente a la fiesta- quitarle los ojos de encima a Miranda, cuya sonrisa cautivó a todos los allí presentes. Las caras de ambos demostraron que, a pesar de muchos rumores, su matrimonio sigue tan bien como el primer día. Más aun si cabe, ya que ahora disfrutan de la presencia del pequeño Flynn, de dos años de edad.
Probablemente tiempo juntos sea lo único que les falte, pero es que sus respectivas profesiones se caracterizan precisamente por absorber mucho tiempo. Por este motivo el ángel de Victoria's Secret declaraba a la revista People hace poco que 'Los dos estamos muy ocupados, por lo que es bonito poder pasar tiempo juntos y no apresurarnos a tener más bebés por ahora'.
La pareja, refugiada en las nuevas tecnologías durante gran parte del año, procura pasar todo el tiempo que pueden juntos, como bien han demostrado durante la noche de ayer. Mientras tanto 'Mucho Skype, especialmente ahora que tenemos un hijo', quien según recoge People es un fan de la videoconferencia. Y es que Miranda asegura que 'No soy muy de hablar por teléfono, prefiero escribir mensajes', de modo que ésta es la única forma de escuchar la vocecita de la australiana.
Miranda, que durante la gala lució un vestido fucsia, posó junto a Orlando con un impresionante vestido color burdeos, con escote en V, gran lazada en la cadera y una abertura en la pierna. Por su parte Bloom vistió un traje azul, sin corbata, ya que se trataba de la after party promocionada por InStyle-Warner Bros.
Muy felices durante toda la fiesta Orlando no pudo - ni casi ningún asistente a la fiesta- quitarle los ojos de encima a Miranda, cuya sonrisa cautivó a todos los allí presentes. Las caras de ambos demostraron que, a pesar de muchos rumores, su matrimonio sigue tan bien como el primer día. Más aun si cabe, ya que ahora disfrutan de la presencia del pequeño Flynn, de dos años de edad.
Probablemente tiempo juntos sea lo único que les falte, pero es que sus respectivas profesiones se caracterizan precisamente por absorber mucho tiempo. Por este motivo el ángel de Victoria's Secret declaraba a la revista People hace poco que 'Los dos estamos muy ocupados, por lo que es bonito poder pasar tiempo juntos y no apresurarnos a tener más bebés por ahora'.
La pareja, refugiada en las nuevas tecnologías durante gran parte del año, procura pasar todo el tiempo que pueden juntos, como bien han demostrado durante la noche de ayer. Mientras tanto 'Mucho Skype, especialmente ahora que tenemos un hijo', quien según recoge People es un fan de la videoconferencia. Y es que Miranda asegura que 'No soy muy de hablar por teléfono, prefiero escribir mensajes', de modo que ésta es la única forma de escuchar la vocecita de la australiana.
