Condenados por terroristas

2 de septiembre de 1989... Procesados con fianza

-El juez Olegario Somoza fija una fianza de cinco millones de pesetas para el concejal de cultura Balbino Álvarez y el empresario Eduardo Fernández, y ninguna para el alcalde Manuel Veiga Pombo, todos ellos procesados por presuntas irregularidades en las fiestas del Corpus de 1988, tras denuncia presentada por el concejal Carlos Trapote.

-El escritor Xosé Neira Vilas recibe el premio “Celanova, casa dos poetas”, en acto celebrado en Celanova y precedido de ofrenda floral al poeta Celso Emilio.

-El diseñador orensano Adolfo Domínguez presenta su nueva colección en París, con colores más claros y el característico corte informal.

-Francisco Rodríguez toma posesión como nuevo presidente de Panamá, mientras Estados Unidos retira a su embajador al considerar que el general Noriega conserva intacto su poder.

2 de septiembre de 1964... Condenados por terroristas

-En Carballino, por los señores de Rodríguez Pereira (don Antonio) y para su hijo Primitivo, ha sido pedida a los señores de Enríquez Larrondo (don Jaime) la mano de su hija Eladia.

-Doña Eva Fernández Bravo nombrada maestra nacional de la escuela de Madarnás (Carballino).

-Se inaugura en Pereiro de Aguiar la nueva farmacia de don Serafín Vidal Pérez, unas modernas instalaciones que fueron bendecidas por el cura párroco don Ángel Eiró González.

-Dos miembros de la agrupación anarquista “Federación Ibérica de Juventudes Libertarias”, el inglés Stuart Christie y Fernando Carballo Blanco, son condenados por un Consejo de Guerra en Madrid, por el delito de terrorismo. Ambos planearon atentados contra altas jerarquías de la nación, llegando a colocar un artefacto explosivo en el estadio Santiago Bernabeu.

-(1) Una vendedora de Canillas.

2 de septiembre de 1939... La angustia del primer chispazo

“Europa siente la angustia del primer chispazo”, titula La Región en primera página. Gran Bretaña cierra toda comunicación telefónica con el mundo y decreta la movilización naval además de evacuar al campo a tres millones de vecinos.

-(2) Publicidad.

-París establece la Ley Marcial. De los puertos marroquíes salen tropas indígenas para Francia.

-El gobernador de la ciudad polaca de Dantzig proclama la anexión de la misma al Reich. Hitler lo confirma en su cargo de gobernador civil. La bandera alemana ondea en los edificios públicos de la ciudad.

-A las 5,45 de la madrugada de ayer comenzaron las hostilidades entre Alemania y Polonia. Alemania publica su primer parte de guerra con los objetivos cumplidos. Goering dice a los aviadores alemanes que la orden para ellos es “Victoria”. 

Una vendedora de Canillas

n (1) Ir a la feria en este tiempo es cosa que da pena. Al no haber animales, el ferial ofrece un aspecto triste. Sin embargo, la feria sigue celebrándose. Allí están las pulperas, con sus calderas panzudas, dispuestas a cobrarle a uno el oro de la aurora; y las rosquilleras, con sus dulces ensartados, para que la gente compre más de una vez, y los coches de carga mixta, pero con la mitad vacía; y en fin, esta mujer, que tenía ante sí un montón de pequeños cilindros de madera, agujereados, otro de madejas de lino y un tercero de tapones de corcho. Es la señora Josefa de Listanco (Maside).

Mientras atiende a la clientela, me informa de cuanto deseo saber.

-A esto –me explica, señalando los cilindros de madera- nosotros le llamamos “canillas” y son para las cubas de vino. Pero como casi nunca “entalan” bien, pues hay que rodearlas con estas hebras de lino, para que queden ajustadas. Las hacemos mi marido y yo. Tenemos tres hijos, pero los tres están ahora por Alemania adelante, trabajando. Las hacemos en invierno pero la temporada de las “canillas” empieza a primeros de septiembre y termina después de las vendimias. Se hacen con madera de amieiro, como los platos del pulpo, totalmente a mano, con un torno que se mueve gracias a un pedal. Después se pulen, hasta que quedan completamente lisas. Para el agujero del centro se usa un taladro.

¿Se vende mucho de esto, ahora?

La mayor venta que tuve, hasta ahora, ha sido en Ribadavia, con unas setecientas “canillas”.  Tambien en Carballiño , unas tres mil al año . Con esto empezó mi abuelo, dice su marido Antonio Puga, hace cerca de cien años. Él hacía  platos, “canillas” y tazas para mazar la leche y los “billotes”, para meter en las “canillas”.

Dígame una cosa, ¿por qué sabe mejor el pulpo en los platos de “amieiro”?

Las pulperas lo saben bien. El plato de madera es plano y, por tanto, al echar algo en él “aumenta” más que echándolo en un plato de fondo.