El firme de la carretera N-525, a su paso por el municipio de Monterrei volvió a hundirse después de que el Ministerio de Fomento realizara una mejora para evitar los corrimientos de tierra que se registran en la zona.
La Guardia Civil de Tráfico volvió a colocar una señal -iconos reflectantes- para advertir a los conductores del peligro que representa el gran agujero que se abrió en el asfalto, entre la cuneta y un carril para vehículos lentos.
El amplio socavón se formó al hundirse el firme en un tramo de la conocida cuesta de As Estivadas, precedido por dos curvas pronunciadas en las que se sucedían los accidentes. De hecho, los conductores disponen en el mismo tramo de un espacio de una pista de arena para frenar en caso de emergencia.
Los agentes ya alertaron del hundimiento del firme a la empresa encargada de la conservación de la vía y a Fomento para que repongan el firme ante el temor de que se produzca un siniestro, dada la fuerte pendiente, un siete por ciento.
FIRME IRREGULAR
En la misma zona, ya fue cerrado en el año 2010 el carril de vehículos lentos al ceder más de diez centímetros el firme y aparecer grandes grietas a lo largo de unos 50 metros. Entonces, el hundimiento se produjo a causa de un corrimiento de tierras al ceder un muro de contención, construido dada la inclinada ladera por la que discurre la nacional. Ese mismo año, Fomento habilitó una partida de más de cien mil euros para sellar la ladera y evitar nuevos corrimientos de tierra en la zona. Varios técnicos de Demarcación de Carreteras del Estado ya inspeccionaron el lugar con el objetivo de acometer nuevos trabajos.
El hundimiento del firme se suma a las numerosas irregularidades que presenta la carretera N-525 entre Ourense y A Mezquita. A lo largo de los 250 kilómetros de trazado se suceden los agujeros y el firme irregular. A esta situación hay que añadirle la falta de señalización horizontal y vertical, lo que dificulta la circulación sobre todo durante las noches y los días de niebla.
Entre las deficiencias también hay que sumar la maleza que crece en ambas márgenes, que en algunos casos, se apodera de buena parte del arcén, lo que resta visibilidad .
En el Ministerio de Fomento aseguraban el pasado viernes que no está previsto de momento ningún proyecto de mejora en el firme de la citada carretera a su paso por la provincia de Ourense.
Recuerdan que ya fueron pavimentados tramos en los municipios de Taboadela, Xinzo, San Cibrao, Verín y A Gudiña, trabajos que incluyeron el sellado de varios desprendimientos y la instalación de nueva señalización.
La carretera N-525, que discurre en paralelo a la autovía Rías Baixas, es utilizada a diario por numerosos conductores para desplazarse a villas como Allariz, Xinzo, Verín y a las capitalidades de los municipios como Monterrei, Trasmiras, Sandiás y el parque empresarial de San Cibrao.
El amplio socavón se formó al hundirse el firme en un tramo de la conocida cuesta de As Estivadas, precedido por dos curvas pronunciadas en las que se sucedían los accidentes. De hecho, los conductores disponen en el mismo tramo de un espacio de una pista de arena para frenar en caso de emergencia.
Los agentes ya alertaron del hundimiento del firme a la empresa encargada de la conservación de la vía y a Fomento para que repongan el firme ante el temor de que se produzca un siniestro, dada la fuerte pendiente, un siete por ciento.
FIRME IRREGULAR
En la misma zona, ya fue cerrado en el año 2010 el carril de vehículos lentos al ceder más de diez centímetros el firme y aparecer grandes grietas a lo largo de unos 50 metros. Entonces, el hundimiento se produjo a causa de un corrimiento de tierras al ceder un muro de contención, construido dada la inclinada ladera por la que discurre la nacional. Ese mismo año, Fomento habilitó una partida de más de cien mil euros para sellar la ladera y evitar nuevos corrimientos de tierra en la zona. Varios técnicos de Demarcación de Carreteras del Estado ya inspeccionaron el lugar con el objetivo de acometer nuevos trabajos.
El hundimiento del firme se suma a las numerosas irregularidades que presenta la carretera N-525 entre Ourense y A Mezquita. A lo largo de los 250 kilómetros de trazado se suceden los agujeros y el firme irregular. A esta situación hay que añadirle la falta de señalización horizontal y vertical, lo que dificulta la circulación sobre todo durante las noches y los días de niebla.
Entre las deficiencias también hay que sumar la maleza que crece en ambas márgenes, que en algunos casos, se apodera de buena parte del arcén, lo que resta visibilidad .
En el Ministerio de Fomento aseguraban el pasado viernes que no está previsto de momento ningún proyecto de mejora en el firme de la citada carretera a su paso por la provincia de Ourense.
Recuerdan que ya fueron pavimentados tramos en los municipios de Taboadela, Xinzo, San Cibrao, Verín y A Gudiña, trabajos que incluyeron el sellado de varios desprendimientos y la instalación de nueva señalización.
La carretera N-525, que discurre en paralelo a la autovía Rías Baixas, es utilizada a diario por numerosos conductores para desplazarse a villas como Allariz, Xinzo, Verín y a las capitalidades de los municipios como Monterrei, Trasmiras, Sandiás y el parque empresarial de San Cibrao.
