En las inmediaciones de la capilla de Os Remedios, los automovilistas aprovechan cualquier espacio, por inverosímil que parezca, para dejar su vehículo a costa incluso de impedir el paso de personas que bajan por las escaleras del Puente Romano. En la zona no hay suficientes plazas de aparcamiento, pero imágenes como esta ya parecen un abuso. Deberían colocar allí unos bolardos para evitarlo.