El proyecto contempla el alcantarillado, asfaltado, completar aceras, mobiliario y señalización
El proyecto de urbanización de las calles Aquilino Sánchez y Camiño de Aquilino Sánchez de Carballiño incluye la erradicación del último vertido importante de aguas residuales al río Carrás. Así lo confirmaba el alcalde, Francisco Fumega, quien aseguró que una vez solucionado este foco de contaminación "só pode quedar algún que outro moi pequeno".
Por ese motivo, se dotará esta zona de una nueva red de alcantarillado a cinco metros de profundidad, que se conectará al colector general de la depuradora del río Carrás. Este y otros vertidos, que se fueron sellando en los últimos años, habían quedado pendientes de la conexión cuando se construyó la canalización de residuales para su posterior depuración hace aproximadamente 10 años. La nueva red se extenderá desde la Carretera de Ribadavia, por Aquilino Sánchez, la calle San Cibrao, hasta el colector general del saneamiento.
El proyecto incluye además el asfaltado de ambas calles, la instalación de mobiliario y la señalización de las plazas de aparcamiento, de tal forma que queden en batería y se aproveche al máximo el espacio disponible, teniendo en cuenta que estas calles forman parte del conjunto que ofertará el Concello como alternativa para el estacionamiento más prolongado de los vehículos cuando empiece a funcionar la zona azul gratuita en el centro, con límite de tiempo de hora y media.
Por otra parte, con estas obras se dará respuesta a la gran demanda por parte del vecindario y conductores habituales de este trazado, no sólo por la necesidad de nuevo asfaltado que tienen las calzadas, sino también por la carencia de aceras en varios tramos, que son especialmente peligrosos para los peatones. El proyecto también contempla esta dotación, muy reclamada por los residentes.
