El juez mandó a prisión a dos de los tres detenidos por el crimen, y el tercero quedó libre con cargos
Una alusión de contenido sexual, referida a la hija de uno de los acusados, podría haber desencadenado la pelea que terminó con la vida del joven rumano Alexandru Walter Boghiu en Cameixa y con su cuerpo arrojado a un canal de aprovechamiento hidráulico de la presa de Alvarellos, en Boborás. Allí, en ese embalse, fue encontrado muerto. Alexandru Walter, según se desprende de la autopsia, aún estaba vivo en el momento de ser arrojado al agua.
Los tres detenidos el pasado lunes, Eduardo L.F. de 36 años, Oscar E.L. de 25, y Brais B.V., de 22, prestaron declaración el pasado día 24 durante más de 10 horas en el Juzgado de Instrucción de Carballiño, cuyo titular, antes de adoptar la resolución, reconstruyó lo sucedido junto a los arrestados, para clarificar lo sucedido. Sobre las ocho de la tarde, el juez envió a prisión a Eduardo L.F. y a Oscar E.L. como presuntos autores de un delito de homicidio o en su caso asesinato, mientras que dejaba en libertad con cargos a Brais B.V., aunque con la condición de que se persone cada 15 días en las dependencias judiciales.
El juez acordó dejarlo libre con cargos porque habría abandonado la noche de fiesta en la que participaba con sus compañeros y con el propio fallecido, antes de iniciarse la reyerta en la vivienda que tiene el de más edad en la localidad de Cameixa, en cuyo pueblo también tiene el domicilio Oscar F.L.
La Guardia Civil bautizó la investigación con el nombre de "Esmorga", al percatarse de que el caso tenía muchos elementos de la tragedia, excesos y violencia reflejados en la novela de Eduardo Blanco Amor con el mismo nombre. Los investigadores sitúan a los cuatro protagonistas del crimen en la noche del pasado día 19, tomando copas por los bares de diversión nocturna de Carballiño, en cuyo recorrido puede que hubieran consumido, según fuentes de la Guardia Civil, algo más que alcohol, algún tipo de sustancia estupefaciente que los agentes están intentando concretar.
Tras la diversión en la villa del Arenteiro, los cuatro se desplazaron a la bodega que hay en la casa de Eduardo L.F., situada en la localidad de Cameixa, donde se produjo el enfrentamiento que acabo con la vida del joven rumano, asentado en Carballiño desde hace ocho años, donde reside su madre (trabaja en tareas domésticas) y un hermano, que tiene su puesto de trabajo en el polígono de A Uceira.
Los dos vecinos que ingresaron en prisión no reconocieron los hechos que se imputan en el Juzgado, asegurando que, tras una discusión, obligaron a Alexandru Walter Boghiu a abandonar la bodega, tras lo que, según declararon ellos, pudo estar deambulando por la zona y caer al canal del embalse, situado a unos dos kilómetros del inmueble.
La Guardia Civil, sin embargo, halló pruebas que los incriminan durante los registros realizados en la jornada del día 23.
