La Consellería de Política Territorial, Obras Públicas e Transportes invertirá 2,7 millones de euros en la construcción de dos carriles adicionales -uno en cada sentido- en la autopista que comunica Santiago con la localidad pontevedresa de Dozón (AP-53), con el objetivo de ampliar la capacidad de la entrada a Santiago desde Ourense.
Además, la citada ampliación de carriles será utilizada en sus dos últimos kilómetros por el tráfico procedente de la nueva autovía Santiago-A Ramallosa (AG-59) que entrará en servicio este año, lo que servirá para descongestionar la salida convencional de la capital gallega por la AC-841, por donde fueron creciendo núcleos como Cacheiras y Os Tilos.
