La cineasta Sara Siadatnejad (Irán, 1978) presentó ayer su último cortometraje experimental Derakhte man (Mi árbol), con el que ha recorrido ya 12 festivales internacionales. Es un filme de apenas seis minutos de duración con el que da testimonio del papel de la mujer en la industria del cine.
La situación social y política que se vive en mi país no ha afectado el desarrollo de las mujeres en la industria cinematográfica iraní. Con estas palabras la cineasta Sara Siadatnejad (Irán, 1978) respondía ayer a una de las preguntas del público, durante los encuentros matutinos que organiza el Festival en el Auditorio.
La directora, productora y actriz puntualizó que en Irán existen más mujeres que hombres destacados por la creación de largometrajes, incluso reconoció a un grupo de seis mujeres consideradas como la nueva ola del cine del Medio Oriente, quienes han recibido más reconocimientos internacionales que los hombres.
Siadatnejad, licenciada en Cine por la Universidad Soureh de Teherán, visitó la ciudad para presentar su último cortometraje experimental Derakhte man (Mi árbol), filmado en 2007, y presentado en 12 festivales internacionales, principalmente de Asia y Europa.
La cinta Derakhte man narra la historia de una artista plástica que intenta dibujar un árbol seco ubicado a unos cuantos metros del mar, y tras cuestionarse la falta de frondosidad del árbol decide incorporarle hojas de papel, hasta que llega un leñador para cortarlo.
Respecto a la carrera que ha tenido este corto, Siadatnejad manifestó sentirse sorprendida por la respuesta del público para con su creación, pues gracias a esta obra, de apenas seis minutos de duración, he podido recorrer el mundo y dar el ejemplo a las directoras de mi país que nuestras historias pueden ser universales.
La cineasta iraní, quien pidió a los fotógrafos durante el acto que no la retrataran sin su burka o turbante, aclaró que los nuevos valores de su país sobreviven gracias a las obras de encargo de las productoras televisivas nacionales y a las empresas privadas de publicidad, pues la falta de fondos institucionales para el cine nos obliga a producir por nuestra cuenta y luego intentamos tener financiación a través de premios en concursos o festivales internacionales como éste.
Una crítica al capitalismo
Durante la actividad Encontros co público la directora iraní estuvo acompañada por el cineasta francés Yan Jaquett, quien presentó por su parte, el cortometraje de animación en 3D, La muñeca de Berni, con el que intenta realizar una crítica al capitalismo y denunciar a los gobiernos por el tráfico de mujeres y el turismo sexual en el mundo.
La cinta cuenta con tintes cómicos la historia de un empleado de una fábrica de comida para gatos que combate su soledad comprando por partes una mujer en países del tercer mundo. Jacquett puntualizó que el objetivo de presentar su cinta al certamen es el de apelar a la sensibilidad de los ourensanos para que contribuyan a denunciar las injusticias que se realizan en las sociedades capitalistas.
La directora, productora y actriz puntualizó que en Irán existen más mujeres que hombres destacados por la creación de largometrajes, incluso reconoció a un grupo de seis mujeres consideradas como la nueva ola del cine del Medio Oriente, quienes han recibido más reconocimientos internacionales que los hombres.
Siadatnejad, licenciada en Cine por la Universidad Soureh de Teherán, visitó la ciudad para presentar su último cortometraje experimental Derakhte man (Mi árbol), filmado en 2007, y presentado en 12 festivales internacionales, principalmente de Asia y Europa.
La cinta Derakhte man narra la historia de una artista plástica que intenta dibujar un árbol seco ubicado a unos cuantos metros del mar, y tras cuestionarse la falta de frondosidad del árbol decide incorporarle hojas de papel, hasta que llega un leñador para cortarlo.
Respecto a la carrera que ha tenido este corto, Siadatnejad manifestó sentirse sorprendida por la respuesta del público para con su creación, pues gracias a esta obra, de apenas seis minutos de duración, he podido recorrer el mundo y dar el ejemplo a las directoras de mi país que nuestras historias pueden ser universales.
La cineasta iraní, quien pidió a los fotógrafos durante el acto que no la retrataran sin su burka o turbante, aclaró que los nuevos valores de su país sobreviven gracias a las obras de encargo de las productoras televisivas nacionales y a las empresas privadas de publicidad, pues la falta de fondos institucionales para el cine nos obliga a producir por nuestra cuenta y luego intentamos tener financiación a través de premios en concursos o festivales internacionales como éste.
Una crítica al capitalismo
Durante la actividad Encontros co público la directora iraní estuvo acompañada por el cineasta francés Yan Jaquett, quien presentó por su parte, el cortometraje de animación en 3D, La muñeca de Berni, con el que intenta realizar una crítica al capitalismo y denunciar a los gobiernos por el tráfico de mujeres y el turismo sexual en el mundo.
La cinta cuenta con tintes cómicos la historia de un empleado de una fábrica de comida para gatos que combate su soledad comprando por partes una mujer en países del tercer mundo. Jacquett puntualizó que el objetivo de presentar su cinta al certamen es el de apelar a la sensibilidad de los ourensanos para que contribuyan a denunciar las injusticias que se realizan en las sociedades capitalistas.