Presentado un proyecto multidisciplinar sobre el pintor en el primer centenario de su nacimiento
Pintor, pensador, creador e investigador de las materias. Todo eso fue el artista ourensano Manuel Prego de Oliver, un hombre que aseguraba que "el cuadro para mí es una cosa viva y la materia, la forma de hacerlo vivir; la calidad de la materia determina la vida del cuadro mucho más que la forma". Esas son las palabras del pintor que recoge Xabier Limia de Gardón, comisario conjuntamente con Natalia Figueiras, para presentar el proyecto que tiene a Prego de Oliver como único protagonista y que organiza el Concello de Ourense.
Aunque el trabajo se inició hace dos años con la vista puesta en este mes de abril, al celebrarse el centenario del nacimiento del autor, finalmente será en septiembre cuando se presenten las tres exposiciones, "ya que el gran volumen de obra de Prego ha hecho que nos haga falta más tiempo para que no falte ninguna documentación", explicó Eva Torres, coordinadora del equipo de trabajo. Este "proxecto de cidade" como lo definió la edil de Cultura y Educación, Ana Garrido, que arrancó por iniciativa de los hijos del pintor, tiene varios pilares: talleres didácticos, conferencias, elaboración de material didáctico, catalogación y recuperación de su obra y tres exposiciones, que comenzarán en septiembre.
El Museo Municipal, la sala Jo- sé Angel Valente y el Centro Social de Afundación serán los espacios que acogerán, respectivamente, las siguientes muestras sobre el autor: "El taller: espacio de creación y materialización plástica. Su obra inédita", con obra no expuesta nunca; "El óleo como materialización de su plástica" y "Del boceto a la obra gráfica".
Manuel Prego de Oliver, hijo del artista, destacó que "a la familia le hace mucha ilusión. Para él era muy importante saber cómo iba a quedar su obra". Aseguró que la familia es la propietaria de un gran número de cuadros, "él se sacrificó mucho y no la quiso vender. Somos, por lo tanto, destinatarios de un patrimonio que no queremos que se pierda ni se olvide, sino que se pueda ver; esa es, creo, la finalidad del arte, no que uno las tenga en casa".
Natalia Figueiras, una de las comisarias, destacó de este proyecto,"el estudio de su obra desde un punto de vista novedoso, un punto de vista científico, en el que estudiaremos también la materia de forma analítica, cuáles usó y sus soportes". De momento, ya son más de 400 obras.
